3- Grafico el siguiente evento del texto.
Juana Maria de Lara se dirigió a la Catedral y solicitó al Padre Molas que diese
santo y seria
Respuestas
Respuesta:
:Si bien el rol de la mujer fue muy limitado, dada la época, pues no se le concedía influencia política, “está el famoso caso de Juana de Lara, que fue una suerte de mensajera”, comentó el historiador Enrique Cosp. Por su lado, Mary Monte de López Moreira explicó que se sospecha que las mujeres de los próceres se involucraron de cierta manera tácita en las decisiones.
Indicó que los patriotas (Fulgencio Yegros, Pedro Juan Caballero, José Gaspar Rodríguez de Francia, Vicente Ignacio Iturbe, Mauricio José Troche, Mariano Antonio Molas, Fernando de la Mora, Francisco Javier Bogarín, Antonio Tomás, hermano de Fulgencio Yegros) se reunían en la casa de los hermanos Pedro y Sebastián Martínez Saenz. Pedro estaba casado con María del Carmen Speratti, hermana de Josefa Facunda Speratti, que en ese momento era novia de Fulgencio Yegros.
“Si bien es cierto que había algunas mujeres en la casa de los Martínez Saenz, como Josefa Facunda y otras mujeres esposas de estos patriotas, como la esposa de Caballero, llamada Juana Mayor (hija de un portugués), de alguna forma intervinieron seguramente, aunque no quedó nada escrito”, sostuvo el historiador.
Sumando vestigios, mencionó a Beatriz Fernández Montiel, esposa de Mariano Antonio Molas; a Josefa Antonia Cohene, que se casó muy joven, a los 14 o 15 años, hija de un famoso y valiente soldado que peleó en las invasiones inglesas, fue esposa de Fernando de la Mora. Otra mujer fue Francisca Benítez, esposa de Mauricio José Troche, y Elisa Echagüe, esposa de Iturbe –que vivía en frente a la Casa de la Independencia–.
En frente a la Casa de la Independencia vivía Doña Juana María de Lara, que estaba emparentada con los Iturbe. La dueña de casa era Nicolasa Marín, esposa de Sebastián Martínez Saenz.
JUANA MARÍA DE LARA
En mayo del 2010, la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad la ley presentada por la proyectista Emilia Alfaro de Franco (Partido Liberal Radical Auténtico) que nombra a doña Juana María de Lara “Prócer de la Independencia de Paraguay”. El Senado ratificó y la ley fue promulgada por el presidente.
Según cuenta Ana Montserrat Barreto Valinotti en la obra “Paraguay: Ideas, Representaciones & Imaginarios” (2011). Abnegación y patriotismo en la figura de la prócer Juana María de Lara. Construcción e idealización de la “matrona” como perfil femenino ideal en el Paraguay de inicios del siglo XX. Pág. 119.
“El domingo 14 de mayo, obedeciendo instrucciones de los jefes de la conspiración, fue como de costumbre a la iglesia de la Catedral. A medida que llegaban los patricios, ella les notificaba del cambio de planes, las acciones a desarrollarse, la hora fijada para su puesta en práctica y la señal que era ‘independencia o muerte’. Consumada la revolución, en la mañana del 15 de mayo, se presentó al cuartel llevando una corona de flores naturales que obsequió al oficial Pedro Juan Caballero, festejando con ello el triunfo glorioso de la emancipación patria” (Alfaro, 2009).
Juana María de Lara fue una dama de la sociedad asuncena de comienzos del siglo XIX. Nació en Asunción y contrajo matrimonio en 1785 con el capitán José Díaz de Bedoya.
SE SABE DE ELLA 80 AÑOS DESPUÉS
“Lo que se sabe de ella (Juana María de Lara) fue gracias a unos escritos, que escribió Jaime Sosa Escalada hacia 1892, que al parecer ella era una mujer de la sociedad paraguaya, distinguida y mayordoma de la capilla de San Francisco y el Santísimo Sacramento de la Catedral. Escalada cuenta 80 años después de la independencia que Doña Juana fue la que llevó el santo y seña –que era independencia o muerte– a los soldados que se encontraban en los cuarteles de la ribera. Al día siguiente visitó el cuartel general donde se encontraba Pedro Juan Caballero”, remarcó Mary Monte de López Moreira.
Mencionó que la historia de las flores que llevó a Caballero, cuyos colores inspiraron la bandera, es un mito. “Eran azucenas azules, jazmines blancos y rosas rojas. Pero las azucenas son de setiembre, no de mayo. Esa fue una invención al parecer de una maestra hacia 1937”, precisó.
Agregó que la independencia del Paraguay ocurrió el 17 de junio de 1811, cuando se estableció el Primer Congreso Nacional y se declara al Paraguay libre. En 1813, Paraguay se declara primera república de Sudamérica.
Respuesta:
:Si bien el rol de la mujer fue muy limitado, dada la época, pues no se le concedía influencia política, “está el famoso caso de Juana de Lara, que fue una suerte de mensajera”, comentó el historiador Enrique Cosp. Por su lado, Mary Monte de López Moreira explicó que se sospecha que las mujeres de los próceres se involucraron de cierta manera tácita en las decisiones.
Indicó que los patriotas (Fulgencio Yegros, Pedro Juan Caballero, José Gaspar Rodríguez de Francia, Vicente Ignacio Iturbe, Mauricio José Troche, Mariano Antonio Molas, Fernando de la Mora, Francisco Javier Bogarín, Antonio Tomás, hermano de Fulgencio Yegros) se reunían en la casa de los hermanos Pedro y Sebastián Martínez Saenz. Pedro estaba casado con María del Carmen Speratti, hermana de Josefa Facunda Speratti, que en ese momento era novia de Fulgencio Yegros.
“Si bien es cierto que había algunas mujeres en la casa de los Martínez Saenz, como Josefa Facunda y otras mujeres esposas de estos patriotas, como la esposa de Caballero, llamada Juana Mayor (hija de un portugués), de alguna forma intervinieron seguramente, aunque no quedó nada escrito”, sostuvo el historiador.
Sumando vestigios, mencionó a Beatriz Fernández Montiel, esposa de Mariano Antonio Molas; a Josefa Antonia Cohene, que se casó muy joven, a los 14 o 15 años, hija de un famoso y valiente soldado que peleó en las invasiones inglesas, fue esposa de Fernando de la Mora. Otra mujer fue Francisca Benítez, esposa de Mauricio José Troche, y Elisa Echagüe, esposa de Iturbe –que vivía en frente a la Casa de la Independencia–.
En frente a la Casa de la Independencia vivía Doña Juana María de Lara, que estaba emparentada con los Iturbe. La dueña de casa era Nicolasa Marín, esposa de Sebastián Martínez Saenz.
JUANA MARÍA DE LARA
En mayo del 2010, la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad la ley presentada por la proyectista Emilia Alfaro de Franco (Partido Liberal Radical Auténtico) que nombra a doña Juana María de Lara “Prócer de la Independencia de Paraguay”. El Senado ratificó y la ley fue promulgada por el presidente.
Según cuenta Ana Montserrat Barreto Valinotti en la obra “Paraguay: Ideas, Representaciones & Imaginarios” (2011). Abnegación y patriotismo en la figura de la prócer Juana María de Lara. Construcción e idealización de la “matrona” como perfil femenino ideal en el Paraguay de inicios del siglo XX. Pág. 119.
“El domingo 14 de mayo, obedeciendo instrucciones de los jefes de la conspiración, fue como de costumbre a la iglesia de la Catedral. A medida que llegaban los patricios, ella les notificaba del cambio de planes, las acciones a desarrollarse, la hora fijada para su puesta en práctica y la señal que era ‘independencia o muerte’. Consumada la revolución, en la mañana del 15 de mayo, se presentó al cuartel llevando una corona de flores naturales que obsequió al oficial Pedro Juan Caballero, festejando con ello el triunfo glorioso de la emancipación patria” (Alfaro, 2009).
Juana María de Lara fue una dama de la sociedad asuncena de comienzos del siglo XIX. Nació en Asunción y contrajo matrimonio en 1785 con el capitán José Díaz de Bedoya.
SE SABE DE ELLA 80 AÑOS DESPUÉS
“Lo que se sabe de ella (Juana María de Lara) fue gracias a unos escritos, que escribió Jaime Sosa Escalada hacia 1892, que al parecer ella era una mujer de la sociedad paraguaya, distinguida y mayordoma de la capilla de San Francisco y el Santísimo Sacramento de la Catedral. Escalada cuenta 80 años después de la independencia que Doña Juana fue la que llevó el santo y seña –que era independencia o muerte– a los soldados que se encontraban en los cuarteles de la ribera. Al día siguiente visitó el cuartel general donde se encontraba Pedro Juan Caballero”, remarcó Mary Monte de López Moreira.
Mencionó que la historia de las flores que llevó a Caballero, cuyos colores inspiraron la bandera, es un mito. “Eran azucenas azules, jazmines blancos y rosas rojas. Pero las azucenas son de setiembre, no de mayo. Esa fue una invención al parecer de una maestra hacia 1937”, precisó.
Agregó que la independencia del Paraguay ocurrió el 17 de junio de 1811, cuando se estableció el Primer Congreso Nacional y se declara al Paraguay libre. En 1813, Paraguay se declara primera república de Sudamérica.