Respuestas
Respuesta:
Aquí algunas utilidades
Explicación:
Desinfectante de objetos: Con algunas gotas de alcohol gel en un paño o algodón, puedes dejar tu computador, televisor o celular, libre de manchas y bacterias.
Limpia Lentes: Con un pañito especial para lentes y algunas gotitas de alcohol gel, los cristales de tus gafas quedarán brillantes.
Elimina el pegote de superficies: Si ves que tienes una ventana pegajosa, o la superficie de los muebles de tu cocina quedaron sucios, aplica alcohol gel y veras que salen inmediatamente esas molestas manchas.
Quita manchas de pintura: Si hace pocos días pintaste tu casa y quedaron unas pintitas en baldosas o cerámicas, apoyate del alcohol gel para dejar tu casa sin rastro alguno de pintura.
Respuesta:
El alcohol en gel o gel hidroalcohólico, gel desinfectante, gel de alcohol, alcohol gel, gel limpiador bactericida o gel antibacterial, es un producto que se emplea como complemento del agua y el jabón para lavarse las manos. Fue creado en 1966 por la estudiante de enfermería Guadalupe Hernández.
El gel hidroalcohólico es un producto empleado para detener la propagación de gérmenes. La cantidad de alcohol en su composición varía entre el 60% y el 85%, siendo la cantidad más común de 70%.
El alcohol mata entre un 99.99% y un 99.999% de las bacterias en un minuto, aunque no actúa contra las esporas de las bacterias anaerobias, de allí que al gel se le agregue agua oxigenada. Es, también, un efectivo viricida y fungicida. Se caracteriza por la rapidez del comienzo de su acción (unos 15 seg).
Cuando las manos no están sucias visiblemente, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CCPEEU) recomiendan el uso del gel para matar la mayoría de bacterias.
Para lavarse las manos con un desinfectante para manos a base de alcohol, los CCPEEU recomiendan lo siguiente:
Aplique el producto en la palma de una mano.
Frote las manos entre sí.
Refriegue el producto sobre todas las superficies de las manos y los dedos hasta que se sequen.
Centros para el Control y Prevención de Enfermedades.
Para los musulmanes, el alcohol es considerado haram (prohibido). Por esta razón, algunos musulmanes no usan el gel sanitizante. Sin embargo, según el doctor musulmán Rajab Abu Mleeh, el alcohol en gel es una medicina y, por lo tanto, es halal (aceptable). Cree que evitar las enfermedades está entre las leyes que los musulmanes tienen que cumplir, y por eso se permiten tocar el alcohol aunque esté prohibido.
Los fricciones con alcohol matan muchos tipos de bacterias, incluyendo las que tienen resistencia a antibióticos y la bacteria de la tuberculosis (Mycobacterium tuberculosis). El alcohol tiene actividad antivírica y pueden "eliminar" efectivamente virus con envolturas como los de la gripe el resfriado común o el VIH.
Un experimento entre 200 trabajadores de FedEx en 2004 demostró que colocar dispensadores de desinfectante para las manos en la oficina, junto con la formación de los trabajadores acerca del uso apropiado, hizo descender el 21% el absentismo laboral. En una escuela de educación primaria, el absentismo había disminuido en un 51%[9] y en un dormitorio universitario disminuyó en un 43%.
Algunos investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Virginia han demostrado que usar el gel sanitizante para detener el resfriado es más efectivo que lavarse las manos.
Según Rotter, las fricciones de alcohol son aproximadamente cien veces más efectivas contra los virus, que cualquier otra forma de lavarse las manos. El alcohol isopropílico mata instantáneamente un 99.99% o más de las bacterias que no forman esporas en menos de 30 segundos.
El alcohol mata microorganismos que causan enfermedades, junto otros microorganismos que no las causan. Sin embargo, investigaciones muestran que el cuerpo repone los gérmenes "buenos" rápidamente, a menudo trasladándolos desde los brazos, donde hay menos microbios dañinos.
Investigadores de East Tennessee State University encontraron geles sanitizantes con una cantidad de alcohol menor a un 40% en tiendas estadounidenses. En hospitales, la óptima cantidad de alcohol está entre el 70% y el 95%.