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Las medidas sanitarias corresponden a todas las practicas implementadas previamente para garantizar la higiene de los productos, lo cual es sumamente importante en la agricultura debido a que son productos orgánicos que serán consumidos por humanos.
Las practicas sanitarias no solo deben corresponder al momento de cosechar, si no también en el cultivo, producción, procesamiento transporte y manipulación de alimentos. puede abarcar desde el estado de las instalaciones, vehículos y depósitos de alimentos, como vestimenta del personal su higiene y sanidad, métodos de recepción de materias primas etc.
Sin embargo, determinar disposiciones ambiciosas de difícil aplicación no es practico, lo ideal, es establecer medidas realistas que se ajuste a las condiciones de cada lugar, con el fin de lograr la producción de alimentos seguros para el consumo humano.
Entre las claves encontramos:
- Al momento de cultivar y cosechar, practicar una buena higiene personal: lavado de manos, cambio de ropa y bañarse con regularidad, cubrirse cortes, lesiones y heridas, y realizar necesidades fisiológicas en inodoros (no en cultivos o plantaciones), debido a que existen microorganismos patógenos se encuentran en las heces humanas, en heridas infectadas, que pueden ser transferidas a los frutos y hortalizas por las manos ropa y otras superficies.
-Proteger los campos de la contaminación fecal por animales: evitar que deambulen por campos de cultivo, mantenerlos ladera abajo de los campos con una zona cercada, retire los desperdicios, ya que esto puede contaminar las cosechas directa o indirectamente con el agua de lluvia que discurre a los campos de cultivo.
- Utilizar residuos fecales tratados: estiércol o excremento adecuadamente tratados, esparcir estos antes de sembrar, y prolongar todo el tiempo posible entre el esparcimiento de residuos y la cosecha. es cierto ellos son un excelente fertilizante seguro y eficaz, sin embargo si no son tratados adecuadamente, pueden sobrevivir microorganismos potencialmente patógenos.
- Evaluar y gestionar los riesgos del agua de riego: evaluar todas las fuentes de agua para el cultivo, que no exista contaminación microbiana o fecal de la misma.
-Mantener limpios y secos los equipos de cosecha y las instalaciones de mantenimiento de las mismas: deben ser lavados previamente con agua limpia y secarles, mantener recipientes separados del suelo antes, durante y después de la cosecha; mantener frías las frutas y hortalizas, limitar el acceso de animales niños y personas no autorizadas a las zonas de cosecha y almacenamiento, para evitar su contaminación y proliferación de agentes patógenos.
Hacer uso de fertilizantes inorgánicos si es necesario.
Las practicas sanitarias no solo deben corresponder al momento de cosechar, si no también en el cultivo, producción, procesamiento transporte y manipulación de alimentos. puede abarcar desde el estado de las instalaciones, vehículos y depósitos de alimentos, como vestimenta del personal su higiene y sanidad, métodos de recepción de materias primas etc.
Sin embargo, determinar disposiciones ambiciosas de difícil aplicación no es practico, lo ideal, es establecer medidas realistas que se ajuste a las condiciones de cada lugar, con el fin de lograr la producción de alimentos seguros para el consumo humano.
Entre las claves encontramos:
- Al momento de cultivar y cosechar, practicar una buena higiene personal: lavado de manos, cambio de ropa y bañarse con regularidad, cubrirse cortes, lesiones y heridas, y realizar necesidades fisiológicas en inodoros (no en cultivos o plantaciones), debido a que existen microorganismos patógenos se encuentran en las heces humanas, en heridas infectadas, que pueden ser transferidas a los frutos y hortalizas por las manos ropa y otras superficies.
-Proteger los campos de la contaminación fecal por animales: evitar que deambulen por campos de cultivo, mantenerlos ladera abajo de los campos con una zona cercada, retire los desperdicios, ya que esto puede contaminar las cosechas directa o indirectamente con el agua de lluvia que discurre a los campos de cultivo.
- Utilizar residuos fecales tratados: estiércol o excremento adecuadamente tratados, esparcir estos antes de sembrar, y prolongar todo el tiempo posible entre el esparcimiento de residuos y la cosecha. es cierto ellos son un excelente fertilizante seguro y eficaz, sin embargo si no son tratados adecuadamente, pueden sobrevivir microorganismos potencialmente patógenos.
- Evaluar y gestionar los riesgos del agua de riego: evaluar todas las fuentes de agua para el cultivo, que no exista contaminación microbiana o fecal de la misma.
-Mantener limpios y secos los equipos de cosecha y las instalaciones de mantenimiento de las mismas: deben ser lavados previamente con agua limpia y secarles, mantener recipientes separados del suelo antes, durante y después de la cosecha; mantener frías las frutas y hortalizas, limitar el acceso de animales niños y personas no autorizadas a las zonas de cosecha y almacenamiento, para evitar su contaminación y proliferación de agentes patógenos.
Hacer uso de fertilizantes inorgánicos si es necesario.
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