Respuestas
Respuesta:
La psicología estudia las manifestaciones en las tres áreas, y no sólo en la mente (como sostenían los estructuralistas o funcionalistas), o en el cuerpo (como sostenían por ejemplo los conductistas). La conducta no es privativa de ninguna de las 3 áreas, sino que se manifiesta en las todas. Por ejemplo, un padre se encuentra pensando en la acalorada discusión que tuvo con su hijo; si analizamos esta situación: los pensamientos serían conductas en el área 1, el sudor sería la conducta manifestada en el área 2 y la pelea con el hijo la conducta en el área 3.
Explicación:
Respuesta:
La psicología estudia las manifestaciones en las tres áreas, y no sólo en la mente (como sostenían los estructuralistas o funcionalistas), o en el cuerpo (como sostenían por ejemplo los conductistas). La conducta no es privativa de ninguna de las 3 áreas, sino que se manifiesta en las todas. Por ejemplo, un padre se encuentra pensando en la acalorada discusión que tuvo con su hijo; si analizamos esta situación: los pensamientos serían conductas en el área 1, el sudor sería la conducta manifestada en el área 2 y la pelea con el hijo la conducta en el área 3.
Explicación:
La psicología estudia las manifestaciones en las tres áreas, y no sólo en la mente (como sostenían los estructuralistas o funcionalistas), o en el cuerpo (como sostenían por ejemplo los conductistas). La conducta no es privativa de ninguna de las 3 áreas, sino que se manifiesta en las todas. Por ejemplo, un padre se encuentra pensando en la acalorada discusión que tuvo con su hijo; si analizamos esta situación: los pensamientos serían conductas en el área 1, el sudor sería la conducta manifestada en el área 2 y la pelea con el hijo la conducta en el área 3.
Bleger sostiene que la conducta siempre implica manifestaciones coexistentes en las tres áreas; la conducta es una manifestación unitaria del ser total, por lo tanto no puede existir ninguna conducta que no implique las tres áreas, éstas siempre coexistentes. Claro que en toda situación podremos observar el predominio de un área sobre las otras. Por ejemplo, si estoy llorando probablemente lo más predominante sea el área 2. Si me encuentro pensando en dónde dejé las llaves de la casa, el predominio será del área 1; y si le grito a alguien predominará el área 3.