Respuestas
Explicación:
Hay una confusión, a veces interesada, que flota en los relatos políticos actuales, sobre la cadena de causalidades que llevan a una determinada situación. He oído demasiadas veces ya que el feminismo ha despertado el machismo, o que el independentismo ha despertado la extrema derecha. El que defiende sus derechos o posiciones políticas no es culpable de la reacción contraria que pueda suscitar. Esto criminalizaría cualquier lucha social ante la resistencia de los mecanismos del poder al cambio. Una cosa es que un hecho desencadene otro y otra muy distinta acusar un movimiento de haber provocado otro. Esto no quiere decir que no sea responsable de sus actos, de los efectos que pueda provocar su acción, pero no necesariamente de las consecuencias que provoque en otros. Quizá la distinción es muy fina, pero si lo aplicamos a estos dos casos, el de la lucha feminista y el del independentismo, creo que se entenderá mejor.