Respuestas
Respuesta:
La desnutrición y las carencias de micronutrientes pueden
ser particularmente perjudiciales para los niños, dejándolos
vulnerables ante las enfermedades infecciosas y, en última
instancia, causando trastornos físicos y cognitivos. La
desnutrición crónica puede causar retraso en el crecimiento
(altura baja para la edad) y emaciación (peso bajo para la
altura). Las dietas que no aportan suficientes micronutrientes
pueden conducir a enfermedades graves, incluyendo anemia,
retraso mental y ceguera permanente.
Tanto la desnutrición como las deficiencias de
micronutrientes pueden afectar al funcionamiento cognitivo
de los niños, impidiéndoles alcanzar su pleno potencial en la
escuela, afectando por tanto a sus
futuras oportunidades de empleo
e ingresos y perpetuando así el
ciclo de la pobreza.
Explicación: