-¿Qué opinas del periodo de Porfirio Díaż? :3
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Respuesta:
El balance general de su gobierno creo que fue negativo. Mucha gente en México lo admira porque con él se alcanzó el primer gran largo período de paz que México vivió desde su independencia. Lo que no dicen o no consideran es que esa paz fue “la paz de los sepulcros” o usando sus propias palabras la paz del “mátalos en caliente”. Es decir, se vivió la ausencia de conflictos visibles pero eso no se debió a que se resolvieran los problemas de fondo sino a que el dictador no dudó en recurrir a métodos represores para callar a sus opositores incluyendo el asesinato y desaparición de personas, así como el sometimiento de pueblos como el Yaqui a una vida prácticamente de esclavitud. Por decirlo en pocas palabras fue un genocida y bajo su mandato la desigualdad no hizo más que aumentar.
La paz de Don Porfirio también nos costó territorio, él decidió dejarle Belice a los ingleses (que había estado hasta aquel entonces en disputa territorial) a cambio de favores que le permitieron mantenerse en el poder. Hubo grandes retrocesos en materia de separación de la Iglesia y el Estado, no hubieron avances significativos en la educación para las mujeres (cosa que sí había ocurrido con Juárez y con Lerdo antes de que él usurpara la presidencia con un golpe militar). No debe sorprender a nadie que la Iglesia Católica fundara un partido Anti-revolucionario y que haya orquestado el asesinato de Madero en contubernio con el embajador de Estados Unidos (todo esto está perfectamente documentado).
Muchos de los logros que la gente menciona sobre Díaz (cómo la construcción de líneas de ferrocarril) empezaron con los gobiernos liberales anteriores a Díaz además de que existió una coyuntura de cambio tecnológico (sería como agradecer a los gobiernos del PRI por el Internet).
Ahora, no se trata de culparlo de todo. En las casi tres décadas que gobernó, una aristocracia se acomodó muy bien a los negocios que él les ayudaba a controlar y construir (por supuesto que se trataba de una pequeñísima minoría, justo como hoy) y fue ese grupo el que lo mantuvo y le dió el poder. Así que no deberíamos hablar tanto de un “Porfiriato”, se trató más bien de un “Porfirismo”. Con esto último quiero decir que se da mucha importancia a su persona y poca a la aristocracia o al sistema que imperó durante su gobierno que les permitía hacer lo que querían y que estaba compuesto por un grupo considerable de personas.
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