Respuestas
La filosofía no es solo buscar el 'saber' es cuestionar y encontrar respuesta a todo lo que se relacione con la vida y la realidad.
La religión se ocupa en buscar la verdad, dar una explicación y comprobar la existencia de Dios.
Si bien la Religión y la Filosofía tienen preocupaciones comunes como la ontología y la moral, “hay una diferencia fundamental entre la ética filosófica y la de las religiones, que es la referencia a una voluntad sagrada, a una voluntad divina.” (1) Esta diferencia procede de la existencia en la Religión de un principio de autoridad exterior. Por el contrario, el filósofo trata de comprender la verdad que le es propuesta y de constatarla en sí mismo para integrarla a través de una progresión de pensamiento y acción.
Para las religiones, la verdad es dogmática y absoluta. No se la puede refutar. Una verdad absoluta puede existir en este plano de la existencia. Para las filosofías, por el contrario, ninguna verdad absoluta puede existir en este plano. En consecuencia, no se puede hablar más que de verdades relativas, y de un acceso a lo verdadero por una ascensión progresiva, a través de la toma de conciencia de nuestra propia ignorancia.
Los filósofos antiguos habían descubierto también que, aunque no se llegase a una verdad, esta ascensión indica una experiencia de orden individual intransmisible, pues la vivencia puede tan sólo vivirse pero no transmitirse. En cambio, el método para que cada cual pueda tener acceso a ella por sus propios esfuerzos sí es transmisible.
No se puede llegar a la verdad ni por la moral, ni por recetas de verdades prefabricadas, ni por ritos. Es el enfoque sobre la verdad el que diferencia a la religión de la filosofía.
El estudio de los conceptos “fe” y “creencia” permite aclarar en qué se diferencian estas vías y cómo se establecen las bases de la filosofía y de la religión, pues una y otra nacen de y maneras de creer disímiles.
Fuente: consulta adicional
http://filosofia.nueva-acropolis.es/2010/filosofia-y-religion/