opinión acerca de los acuerdos de paz *:* ´porfavor
doy coronita gracias.

Respuestas

Respuesta dada por: eltigreroomar
1

Mi Opinión desde Venezuela:

Cumplidos diez meses del inicio de los diálogos de paz con la guerrilla de las Farc, el país sigue con expectativa el desarrollo de las conversaciones y los posibles acuerdos que puedan lograrse por la administración Santos. Las opiniones son diversas, las conjeturas muchas y la información sesgada y contradictoria.

Lo bueno corre por cuenta, del reconocimiento del grupo insurgente de que tras medio siglo de lucha armada, no hay forma de alcanzar el poder por las armas y en el contexto geopolítico actual, tienen mayor oportunidad dentro del sistema electoral de participar en los órganos de la administración pública. Bueno, también es, que en los debates del eventual acuerdo se revisen las políticas y regulaciones sobre las condiciones de la desigualdad social en Colombia.

Lo malo en cambio, es que el publicitado slogan que con los acuerdos de La Habana, se alcanzara la anhelada paz en el territorio nacional, no pasa de simples avisos, toda vez que de los diálogos tan solo pueda lograrse la desmovilización de un sector de esta guerrilla, si se tiene en cuenta que muchas de sus columnas y militantes no acatarán el pacto de rendición, ni mucho menos se logrará la pacificación de las regiones azotadas por otros grupos de violencia, como la guerrilla del Eln, las Bracrim y la delincuencia organizada.


ramirezxiomi2328: ok gracias
Respuesta dada por: yazminivity
1

Respuesta:

Opiniones sobre las perspectivas de la paz en Colombia

Marc Chernick, Malcolm Deas y Marco Palacios

p. 111-114

Texto | Cita | Autores

Texto completo

Malcom Deas: En el futuro cercano yo veo un panorama muy complejo. Hay razones estructurales para ello. Si se mira el proceso colombiano en comparación con el de Irlanda, hay algunas semejanzas, aun cuando también obvias diferencias. Un rasgo similar, que es \ necesario tener en cuenta, es la lentitud en el cambio de dirección de los movimientos armados. Es muy lento el cambio de orientación del liderazgo guerrillero. Pasan ocho años o una década entre la primera decisión seminal que privilegia la vía política como fundamental a largo plazo y la decisión definitiva de abandonar los métodos violentos. Hay que considerar, además, que inmersos en un proceso de negociación, la estructura del i movimiento armado y su estabilidad resultan frágiles. Adicionalmente, se requiere de ejercicios sicológicos largos. No es fácil admitir que aquello por lo que se luchó estaba mal, que había sido una equivocación. Es importante dorar la píldora respecto a este cambio. Además, se generan tensiones dentro de la organización, entre los que han racionalizado el cambio de actitud y los [que no lo tienen previsto y se mantienen del lado guerrerista. Es un proceso delicado dentro del [movimiento y los líderes tienen que mantener su autoridad. Y dentro del movimiento tienen que mantenerse con bastante hermetismo y hacerse los caraduras.

En el caso colombiano existe un problema adicional, aun a sabiendas de que siempre hay golpes antes de las conversaciones que tratan de afectar la negociación, como es el caso de Mitú. Este problema tiene que ver con una correlación de fuerzas que no es muy propicia actualmente para hacer viable la negociación. Los casos de negociación exitosa parten de una correlación favorable, en el sentido de que ambas partes ven con claridad que no les conviene seguir en la lucha. Eso no se ve claro aquí, aunque no es fácil saber la situación real. Uno ve que el desarrollo de las negociaciones es realmente imprevisible y no se sabe cómo se puede presionar, pues no se conocen sus reglas. Las FARC, por ejemplo, tienen una gran oportunidad, pero a la vez un desafío, con el despeje. Todo el mundo va a estar mirando con mucho cuidado cómo manejan eso. Esto abre ciertas posibilidades, pero genera cierta responsabilidad y posiblemente ciertos compromisos. Para ellos es difícil manejar esta situación. Si tienen mucho éxito, eso es muy bueno, pero también es difícil saber manejar el éxito. Se pueden envalentonar y pensar en cosas más grandes. Pero el exceso de éxito puede enredar antes que favorecer, crea problemas nuevos. Sin querer entrar en la jerga de los especialistas para hablar de "guerra de movimientos" y "guerra de posiciones", es obvio que los éxitos de la guerrilla generan nuevos problemas; no puede ser sólo una cadena de éxitos

Explicación:


ramirezxiomi2328: gracias
yazminivity: De nada
ramirezxiomi2328: o has buscado en internet
yazminivity: No
ramirezxiomi2328: ok te dare la coronita da igual de donde sacastes la informacion
yazminivity: Gracias
ramirezxiomi2328: no ay de que
yazminivity: Ok
ramirezxiomi2328: q yo solo cumplo lo que digo jeje
yazminivity: XD XD
Preguntas similares