“La Cortesana S.A.”


Panadería y confitería del Municipio de Viamonte, provincia de Córdoba, está estudiando sustituir la provisión de harina 000 que hasta hoy viene efectuándole “Molinos Di Natale S.A.” (a $50 la bolsa de 50 Kg.) por producción propia.

Amílcar García (Presidente de La Cortesana S.A.) se reunió con José Antonio Maidana, que diseñó y fabrica en dicho municipio molinos harineros autónomos como aquel cuya compra se está analizando.

El señor Maidana le informa que el molino harinero autónomo – modelo chico – permite producir 280 kilos de harina 000 en una jornada de 8 horas, y cuesta US$ 9.000.- puesto en la puerta de la panadería. Su sistema exclusivo consiste en un solo par de rodillos de acero dividido en sectores por los que sucesivamente pasa el trigo o el material molido, y un cilindro cernidor acarreador que lleva el material de un sector a otro y separa la harina de la cáscara, las que se envían a sendas boquillas para su embolsado o almacenaje. Al respecto, le mencionó que el afrechillo de trigo, subproducto de la molienda, está siendo comprado, a razón de $ 160 la tonelada, por tamberos de la zona que lo utilizan para “balancear” las dietas de vacas lecheras de alta producción.

El señor García le indicó que la producción de “La Cortesana” insume 5,6 bolsas de 50 kilos de harina 000 en cada uno de los 360 días que la panadería trabaja al año. Y que siempre, para cubrir posibles deficiencias en el aprovisionamiento, se ha contado con un capital de trabajo equivalente a la harina necesaria para trabajar diez días.

El señor Maidana le hizo saber que el funcionamiento del molino, totalmente autónomo, no requiere atención permanente. Está provisto de un sistema de alimentación que asegura un flujo constante de trigo en la entrada. Cuenta con una tolva con una capacidad estándar de media tonelada de trigo. Una persona debe encargarse del llenado de la tolva y de retirar tanto las bolsas de harina como las de afrechillo.

El señor García pensó: “A Antonio, que se ocupa del almacén de harina durante cuatro horas y gana $ 5.200.- al año, podríamos duplicarle el sueldo para que administre el trigo y se ocupe del molino durante las ocho horas diarias (los 360 días del año) que lo tendremos produciendo. El mantenimiento (que se limita al engrase periódico de alemites y a la verificación diaria de las tensiones de las correas, cadenas, y del estado de las varillas de suspensión) también estará a su cargo”.

Comentó el señor Maidana que cada tonelada de trigo (que se está pagando $ 380 en Viamonte) procesada rinde 700 kilos de harina 000 y 300 kilos de afrechillo. Mencionó como ventaja adicional que “La Cortesana”, al pasar a controlar su propia producción, no necesitaría acumular tanta harina (diez días) en stock, y aconsejó reducir las existencias a la mitad, así como adicionar a ese capital de trabajo el trigo que requerirían cinco días de trabajo del molino. La idea agradó al señor García.

El molino autónomo chico consume 2,5 kw/h en cada una de las 8 horas de los 360 días (“La Cortesana” ya cuenta con suministro eléctrico trifásico, pagando $ 0,30/kw).

Un proveedor local acordó proveer todas las bolsas de papel (de 50 kilos de capacidad) que fuesen necesarias para la harina y el afrechillo, a US$ 0,25 la unidad.

El señor García telefoneó al Jefe del Registro Civil local para informarle que era probable que “La Cortesana” no pudiera seguir alquilándole como hasta entonces (a $ 150 mensuales) el local del que disponía para guardar su 4 X 4, pues las dimensiones del molino lo convertirían en el lugar ideal para su instalación.

La AFIP establece que bienes de capital como este molino deben amortizarse linealmente en diez años. La vida útil del proyecto se estimó en cinco años teniendo el molino un valor de mercado de U$S 3.000 al finalizar las actividades.

La actividad de “La Cortesana S.A.” es gravada por el impuesto a las ganancias, cuya tasa efectiva es del 35% pagadero en el mismo año que se produce.

La tasa de corte de la empresa es del 20%. Los accionistas de la firma requieren de los proyectos una tasa de retorno mínima del 22 %.


“La Cortesana S.A.”, muy buen cliente del Banco del Suquía, podría financiar hasta el 70% del precio de compra del molino, pagadero a cinco años en cuotas anuales iguales a una tasa del 24% anual.


Tipo de cambio: $ 15 / US$.

Se le consulta:


1. ¿Es rentable el proyecto?


2. Determine la rentabilidad del accionista. Conviene financiarse. ¿Por qué?

Respuestas

Respuesta dada por: prisci0997
6

Respuesta:

nolo se quizas si buscas otro lado te ayude

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