Respuestas
En las artes plásticas tendemos a percibir ciertos elementos como figura (con formas y bordes) y otros como fondo (difusos y en segundo plano), independientemente del porcentaje de área que ocupen.
Los psicólogos de la Gestalt, corriente de la psicología de principios del siglo XX, han estudiado cómo percibimos los elementos de una manera interrelacionada y organizada, y cómo esta percepción está sujeta a aspectos que atañen al sujeto (quién observa, con qué actitud, cuánto tiempo observa, etc.). Respecto a los aspectos formales, destacan que no percibimos ningún elemento independientemente, sino en relación con otros, resultando el todo algo más que la suma de las partes.
Para los psicólogos de la Gestalt, el primer estadio en la organización perceptual es la configuración de totalidades, que consta de dos componentes:
Una parte más estructurada y bien delimitada, denominada «figura».
Otra parte indiferenciada y periférica que captamos de modo difuso, denominada «fondo».
Además, añaden que la igualdad de estimulación produce fuerzas organizativas de cohesión (asimilación), mientras que la desigualdad de estimulación da lugar a fuerzas organizativas de segregación (contraste):
Asimilación: tendencia a minimizar las diferencias entre algunos elementos.
Contraste: tendencia a exagerar las diferencias entre algunos elementos.
Figura y fondo presentan un contraste; esta configuración figura-fondo se halla necesariamente presente en cualquier percepción. Aspectos básicos diferenciadores entre figura y fondo son:
Figura Fondo
● Tiene forma, contorno.
● Sobresale en primer plano.
● Adquiere significado.
● Presenta colores densos y sólidos.
● Se recuerda mejor.
● Es difuso, informe.
● Queda en segundo plano.
● No es significativa.
● Presenta colores diluidos.
● El recuerdo es menor.
Edgar Rubin, también psicólogo de la Gestalt, trabajando con una serie de figuras ambiguas (figuras reversibles fondo-figura, como su célebre «copa»), creyó haber demostrado que toda percepción se basa en la organización figura-fondo, con el argumento de que los sujetos no pueden percibir figura y fondo a la vez.
Algunas de las ideas principales de Rubin acerca de la relación figura-fondo son las siguientes:
La figura está considerada como objeto, mientras que el fondo se concibe como espacio.
El fondo, en la mayoría de los casos, puede imaginarse como continuo detrás de la figura.
La figura parece estar más cerca de la persona que la observa. El fondo no tiene una localización establecida.
La figura se recuerda más que el fondo porque tiende a producir un mayor impacto visual.