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Respuesta:
Su diferencia más notoria radica en su empleo, puesto que los adverbios se utilizan para modificar verbos, adjetivos, otros adverbios e inclusive oraciones, mientras que los pronombres se utilizan para hacer referencia a un nombre o sustantivo o, bien, a un elemento extralingüístico.
Explicación paso a paso:
Espero haberte ayudado :)
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Espero te ayude
Explicación paso a paso:
Su diferencia más notoria radica en su empleo, puesto que los adverbios se utilizan para modificar verbos, adjectivos, otros adverbios e inclusive oraciones, mientras que los pronombres se utilizan para hacer referencia a un nombre o sustantivo o, bien, a un elemento extralingüístico.
Los adverbios responden a preguntas tales como: ¿cuándo?, ¿cuánto?, ¿cómo?, ¿dónde?, entre otras, con el fin de expresar circunstancias ya sea de modo, tiempo, lugar, cantidad, etc. Su modificación dependerá del contexto lingüístico al cual se apliquen.
Mientras los pronombres sirven de referencia a nombres o sustantivos, que pueden ser contextuales o extralingüísticos dentro de una oración. Se genera a partir de ello el concepto de deixis o “punto de referencia” que posee una palabra o grupo de palabras en una oración. Su referente dependerá del contexto lingüístico al cual se apliquen.
Los adverbios pueden formar sintagmas adverbiales, cuyo núcleo es un adverbio u otra palabra que ejerza algún tipo de función adverbial, y los pronombres sintagmas nominales, cuyo núcleo es un nombre o sustantivo, pronombre u otra palabra que ejerza función de sujeto dentro de una oración.
Los adverbios suelen dividirse en dos categorías básicas dentro del idioma Español: adverbios circunstanciales y adverbios epistémicos, las cuales cuentan con sus respectivas sub-categorías. Los pronombres, por su parte, se dividen generalmente en seis categorías básicas: personales, demostrativos, relativos, enfáticos, indefinidos y numerales, las cuales cuentan con sus respectivas sub-divisiones.
Los adverbios no pueden constituir una unidad contextual clara dentro de un contexto oracional, puesto que siempre necesitan una palabra o palabras a las cuales modificar. A diferencia de los pronombres, los cuales pueden encontrarse dentro de un contexto oracional sin necesidad de tener una palabra o palabras a las cuales hacer referencia.