Respuestas
Respuesta: basado en lo que explica la biblia
Explicación:
Todos debemos arrepentirnos
¿Qué es el pecado?¿Qué efectos tienen nuestros pecados en nosotros?
La fe en Jesucristo naturalmente conduce al arrepentimiento. Desde los tiempos de Adán hasta la época actual existe la necesidad del arrepentimiento en el mundo. El Señor instruyó a Adán: “Enséñalo, pues, a tus hijos, que es preciso que todos los hombres, en todas partes, se arrepientan, o de ninguna manera heredarán el reino de Dios, porque ninguna cosa inmunda puede morar allí, ni morar en su presencia…” (Moisés 6:57).
Venimos a la tierra con el propósito de crecer y progresar, lo que constituye un proceso de toda la vida. Durante ese período, todos pecamos (véase Romanos 3:23), por tanto, todos tenemos la necesidad de arrepentirnos. Algunas veces pecamos por ignorancia, otras por debilidad y en otras ocasiones debido a nuestra desobediencia deliberada. En la Biblia leemos que “…no hay hombre justo en la tierra que haga el bien y nunca peque” (Eclesiastés 7:20) y que “si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros” (1 Juan 1:8).
¿Qué es el pecado? Santiago dijo: “El pecado… está en aquel que sabe hacer lo bueno y no lo hace” (Santiago 4:17); Juan describió al pecado como “toda maldad” (1 Juan 5:17) y la “transgresión de la ley” (1 Juan 3:4).
Es por eso que el Señor dijo que “…es preciso que todos los hombres, en todas partes, se arrepientan…” (Moisés 6:57). Con excepción de Jesucristo, que vivió una vida perfecta, toda persona que haya vivido sobre la tierra ha pecado. Nuestro Padre Celestial, en Su gran amor, nos ha proporcionado la oportunidad de arrepentirnos de nuestros pecados.
Cómo liberarnos de nuestros pecados por medio del arrepentimiento
¿Qué es el arrepentimiento?
El arrepentimiento es el medio que se nos ha proporcionado para liberarnos de nuestros pecados y recibir el perdón de ellos. Los pecados retrasan nuestro progreso espiritual e incluso pueden detenerlo. El arrepentimiento permite que progresemos y crezcamos espiritualmente de nuevo.
El privilegio del arrepentimiento se hace posible mediante la expiación de Jesucristo. En cierta manera que no comprendemos plenamente, Jesús pagó por nuestros pecados. El presidente Joseph Fielding Smith dijo al respecto:
“Yo he sufrido dolor; ustedes también lo han sufrido y a veces éste ha sido muy severo; pero no puedo comprender aquel dolor que… puede hacer que la sangre en forma de sudor, aparezca sobre el cuerpo. Lo sucedido fue algo terrible, altamente aterrador…
“Ningún hombre nacido en este mundo habría podido soportar el peso de la carga que soportó el Hijo de Dios al tomar sobre sí mis pecados y los de ustedes, y hacer posible que pudiésemos escapar de nuestros pecados” (véase Doctrina de Salvación, compilación de Bruce R. McConkie, 3 tomos, 1954–1956, tomo I, pág. 125; cursiva del original).
El arrepentimiento a veces requiere un gran valor, mucha fortaleza, muchas lágrimas, constantes oraciones e incansables esfuerzos por vivir los mandamientos del Señor.