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El monóxido de carbono es un gas venenoso, inoloro e incoloro, que se produce por la combustión incompleta del carbono presente en materiales tales como leña, carbón de leña, gas, kerosene, alcohol, gas oil y nafta, indican desde el Ministerio de Salud de la Nación.
A partir de estas características, es que, comúnmente, el monóxido de carbono es conocido como "el asesino invisible", ya que, una vez inhalado, se combina con la hemoglobina de la sangre a través de los pulmones e impide que el oxígeno llegue a los órganos vitales. Por año, en todo el país, mueren cerca de 200 personas por inhalación de tales gases tóxicos, y, según los expertos en el tema, la vida media en personas sanas que respiran este aire contaminado varía entre tres a cuatro horas.
Es crucial ser precavidos con la revisión de los artefactos de gas y con la ventilación de los ambientes.
Pero esta problemática se incrementa, aun, más en las épocas de baja temperatura. Para hacerle frente a la ola polar, muchas veces se recurre a la utilización de estufas, hornallas, hogares a leña, salamandras y hasta braseros, en el caso de los más humildes, sin reparar demasiado en el estado de tales artefactos.
Por esta razón, desde el Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS) brindan una serie de recomendaciones de seguridad para evitar intoxicaciones. En primer lugar, remarcan: “Hacé revisar una vez al año los artefactos de gas por un gasista matriculado, preferentemente cuando bajan las temperaturas”.
Asimismo, recomiendan colocar "rejillas de ventilación permanentes. Son obligatorias para todo artefacto de cámara abierta", al tiempo que explican que la llama de los artefactos a gas deben ser siempre de color azul: si es amarilla, anaranjada o roja -recalcan- "está funcionando mal" y posiblemente, esté liberando monóxido de carbono en el ambiente.
De acuerdo al ente regulador, además, hay que chequear que "los conductos de evacuación de gases no esté rotos o tengan obstrucciones. También, se debe recordar que las hornallas y los hornos no son para calefaccionar, eso es peligroso". Por otro lado, a quienes tenga un detector de monóxido de carbono, les solicitan mantenerlo activado. Y aconsejan dejar "siempre una rendija abierta; es importante que haya circulación libre de aire desde el exterior".
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Explicación:
El monóxido de carbono es un gas venenoso, inoloro e incoloro, que se produce por la combustión incompleta del carbono presente en materiales tales como leña, carbón de leña, gas, kerosene, alcohol, gas oil y nafta.
A partir de estas características, es que, comúnmente, el monóxido de carbono es conocido como "el asesino invisible", ya que, una vez inhalado, se combina con la hemoglobina de la sangre a través de los pulmones e impide que el oxígeno llegue a los órganos vitales.