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Un mito es un relato tradicional que se refiere a acontecimientos sorprendentes, protagonizados por seres sobrenaturales o extraordinarios, tales como dioses, semidioses, héroes, monstruos o personajes fantásticos. Por lo general, los mitos narran el origen o la creación de algo, sea un elemento natural (un lago o una montaña en concreto, por ejemplo), los dioses, el ser humano, una técnica o procedimiento determinado (ejemplo: el calor para fundir el hierro), una costumbre concreta (ejemplo: bostezar antes de dormirse), las instituciones, la existencia del bien y el mal o una enseñanza sobre el comportamiento de las personas. También hay ciertos mitos que anuncian el futuro o el fin del mundo. Podéis encontrar algunos ejemplos en esta página.
El trabajo de redacción de esta semana consiste en escribir un mito. Aquí van algunos requerimientos y consejos para realizar adecuadamente esta tarea:
Reflexiona primero sobre el tema principal del mito y sobre la función que quieres darle.
Elige cuidadosamente a los dioses y personajes humanos (siempre inventados) que protagonizarán el relato y decide qué cualidades resaltarás en unos y otros.
Escoge el lugar en el que se desarrollará la acción; esto a veces es bastante importante, sobre todo si vas a explicar el origen de ese lugar.
Decide qué elementos maravillosos o mágicos incorporarás a la trama.
Idea un desenlace en el que se refleje claramente la función que le has asignado al mito.
El mito sobre el que escribas debe ser original y creativo, inventado por ti, además tendrá tema libre, aunque puedes adaptarlo a una de estas estructuras:
Un mito que sirva para explicar el origen de nombres, costumbres, fenómenos naturales… (Mitos etiológicos)
Un mito que proporcione una determinada enseñanza sobre el comportamiento humano y que nos lleve a obrar de una determinada manera. (Mitos morales)
Una combinación de ambos (algo que ocurre en los que al mismo tiempo que explican el origen de algo aportan una moraleja sobre alguna cuestión).
Recuerda que la extensión del trabajo es la habitual (entre 200 y 300 palabras) en un folio blanco por una cara.
Cuida la ortografía (tanto en tildes como en la grafía) y la presentación (márgenes suficientes, título original, buena caligrafía, limpieza, división por párrafos…)
Revisa y corrige la expresión antes de entregar tu trabajo: evita repeticiones, asegúrate de la coherencia del texto, selecciona bien el léxico empleado, usa bien los signos de puntuación…
Explicación: ESPERO QUE TE SIRVA MI RESPUESTA