hola, por favor alguien que me ayude con una fabula relacionada con el covid 19 por favor, es urgente
Respuestas
Respuesta:
Había una vez un virus
grande, feo y contagioso
que nos puso de cabeza
porque era muy peligroso.
Como llevaba corona,
se creía que era rey.
No sabía que las personas
podrían luchar contra él.
Los sabios lo analizaron
al derecho y al revés
y pudieron descubrir
su punto débil también.
Aunque parecía muy fiero,
cuando atacaba a un humano,
él y todos sus hermanos
al agua y jabón tenían miedo.
Mi mamá me dijo
que el Coronavirus
es asunto serio,
cómo cuidarnos
no es misterio.
No hay que saludar
con besos ni abrazos,
y al toser y estornudar
usar el pliegue del brazo.
Lavarse las manos
con mucha frecuencia
es pensar y actuar
con inteligencia.
Con agua y jabón
podemos defender
al planeta entero
del virus aquél.
Quedarnos en casa
cuida de nosotros
y también evita
contagiar a otros.
Y colorín, coloridos
juntos podemos vencer
al coronavirus.
Explicación:
me lo ise en word tambien me lo pidieron :v
Respuesta:
Explicación:
Érase una vez un presidente llamado Pedro Sánchez con un ego desmesurado que no sabía gobernar. Pedro no tenía ni idea de cómo gestionar un país, pero el poder le encantaba. Se hacía llamar a sí mismo “Mi Persona” y se rodeó de un séquito de aduladores integrado por ministros, periodistas, artistas e influencers mediáticos dispuestos a alabarlo hasta la náusea a cambio de las migajas del poder que Pedro compartía con ellos.
Para que el pueblo no se percatase de su incapacidad para gobernar, Pedro decidió entretenerle con relatos épicos en los que él fuese el protagonista. Así que decidió contratar al mejor cuentacuentos del país y lo llevó a vivir junto a él al palacio de la Moncloa. Se llamaba Iván y era un hacedor de fábulas extraordinario. Convenció a los ciudadanos españoles de que les asediaban temibles enemigos como el neoliberalismo, la derecha, el cambio climático o la violencia de género. Y de que sólo Pedro con sus ministros, enfundados con sus armaduras de lo políticamente correcto, podrían salvarles entregándoles su libertad a cambio de seguridad. Así que el Gobierno declaró la emergencia climática, decretó la alerta antifascista y se dispuso a combatir los feminicidios. El pueblo suspiró aliviado y agradecido: cierto es que sus gobernantes cometían escandalosos excesos, pero era el precio a pagar por el bien común.
El crítico era acusado de ser un fascista liberal crispador y corrupto, adorador de Franco, amante de las catástrofes medioambientales y defensor de machistas maltratadores
Si alguien acusaba a Pedro de mentir, exagerar o cuestionaba la efectividad de sus medidas, los escribanos de Iván se ponían manos a la obra para identificarlo con el enemigo. El crítico era acusado de ser un fascista liberal crispador y corrupto, adorador de Franco, amante de las catástrofes medioambientales y defensor de machistas maltratadores. Así, poco a poco, Iván consiguió que la gente identificase al enemigo con la oposición. Que asumiesen que la manera más efectiva de derrotar al mal era hacer desaparecer al rival político.