Respuestas
Respuesta:
Espero te ayude esta informació ;)
Explicación:
Los orígenes de los primeros habitantes de Nueva Zelanda se pierden en la noche de los tiempos, en las brumas de la leyenda. Os mostramos algunos datos sobre esta fascinante cultura y su historia.
Nadie sabe a ciencia cierta cómo llegaron los maoríes a Nueva Zelanda: la tradición cuenta que los primeros maoríes llegaron desde la mítica tierra de Hawaiki en siete barcas cuyos pasajeros fundaron las siete tribus originarias. La teoría actual es que los maoríes son descendientes de polinesios llegados hace más de 1.000 años que, al verse aislados, desarrollaron una cultura propia. La prueba de su procedencia estaría en su lenguaje, muy similar al hablado en Tahití. De hecho, en ambos idiomas la palabra maorí significa "normal" o "nativo".
Sin embargo el supuesto aislamiento de los maoríes actualmente ha sido puesto en duda. El hecho de que existan plantas americanas como el camote en tierra neozelandesa podría significar que los maoríes tuvieron contacto con indígenas peruanos incluso antes de que los españoles llegaran a América.
La sociedad maorí era de religión animista y organización aristocrática. Su población se dividía en siete tribus, descendientes de aquellas que llegaron por primera vez a Nueva Zelanda. Como detalle curioso diremos que los famosos tatuajes faciales maoríes (mokos) eran "marcas de clan".
Y hablando de tatuajes, detengámonos un momento en su arte: según varios estudios se trataría de una evolución del antiguo arte polinesio (complejas composiciones geométricas que a menudo representan figuras reales, pero estilizadas) si bien los maoríes solían centrarse en la figura humana y apenas se escogían motivos animales. También son escasas las obras artísticas de carácter religioso.
Como suele suceder en estos casos, el contacto con los europeos supuso un cambio radical en su sociedad. Estos se produjeron principalmente en el siglo XVIII, con las grandes expediciones inglesas y, anecdóticamente, con presos que lograban escapar de Australia. En 1830 se calculaba que había 2.000 europeos viviendo entre maoríes y en 1840 Nueva Zelanda pasó a ser colonia inglesa. Como suele pasar en estos casos creencias y cultura europea se impusieron a las indígenas.
Sin embargo, a día de hoy la cultura maorí está experimentando un resugirmiento: su arte, lengua y filosofía han pasado de ser un legado antiguo a una seña de identidad en el presente.