Respuestas
Resultado de la Guerra
•Paz de Westfalia
•Finalización de la supremacía de la Casa de Habsburgo
•Inicio del dominio de la Casa de Borbón
•Inicio del Imperio sueco
•Independencia de las Provincias Unidas
•Descentralización del Sacro Imperio Romano Germánico
•Guerra franco-española hasta 1659
•Disminución sustancial del poder y la influencia de la Iglesia católica
Respuesta:
Fase Bohemia
La elección de Fernando II como rey de Bohemia causó una gran revuelta de protestantes por toda la zona, la cual tardó un par de años en ser detenida. Lo que en principio fue solo un conflicto interno llegó a otros países, siendo esta revuelta la que comenzó la guerra de los 30 años.
En esta fase sucedió uno de los momentos de mayor tensión entre ambas religiones, la llamada Tercera defenestración de Praga. En este evento una serie de protestantes secuestraron a dos funcionarios del rey y los lanzaron por una ventana del palacio, tomando Praga y formando un gobierno. Tras esto eligieron a Federico V como persona que debía tomar el trono, siendo un ataque directo al verdadero rey, Fernando II.
Fernando eligió como su general a Von Tilly, quien recuperó numerosas ciudades y llegó a Praga donde obligó a Federico V a huir de la ciudad, y después arrasó la ciudad de Praga. Fernando II volvió a gobernar, prohibiendo la libertad de culto. Parecía que toda había terminado, pero la guerra ya se había vuelto un conflicto internacional.
Fase danesa
Fernando II había conseguido tomar Bohemia y el Palatinado, dos de los electores protestantes, quedando solo dos regiones protestantes libres. Por esto la elección del emperador se volvió claramente hacia el lado católico, estando los protestantes en gran minoría.
Los protestantes estaban en minoría, así que pidieron ayuda a Cristian IV, rey de Dinamarca, el cual tenía intereses económicos en entrar en una guerra con Alemania. Cristian decidió atacar Alemania, pero fue vencido por Von Tilly, siendo obligado a firmar la Paz de Lubeck, según la cual Dinamarca prometía no ayudar a los protestantes enemigos de Fernando II. El emperador no tardó mucho en vengarse de los principales protestantes alemanes, obligándoles a devolver los bienes a la iglesia católica.
Fase sueca
Fernando II solo conseguía victorias, pero tenía tantos enemigos que nunca terminaban. El último en entrar la guerra fue Gustavo Adolfo, rey de Suecia, quien había sido convencido por el ministro francés Richelieu de atacar a Fernando.
El ejército sueco era el mejor del mundo, y no tardó demasiado en conseguir grandes victorias frente a Alemania. Gran parte del mérito era de Gustavo Adolfo, un gran guerrero que combatía en primera línea de batalla, lo cual le terminó costando la vida en una de las batallas contra los alemanes.
La pérdida de Gustavo Adolfo fue enorme para los suecos, los cuales terminaron perdiendo todo las zonas que habían conseguido. Todo esto terminó provocando la Paz de Praga, la cual daba beneficios a Fernando II, y era horrible para los intereses suecos.
Fase francesa
Richelieu había utilizado a Gustavo Adolfo para debilitar a los alemanes, consiguiendo con ello que la entrada de los franceses a la guerra fuera mucho más sencilla. El ministro francés consiguió ayuda de Sajonia, Países Bajos y parte de Italia, para enfrentarse a la unión formada por los alemanes y españoles, ambos de la Casa de Habsburgo.
Durante años hubo numerosas batallas, pero ninguno de los dos bandos parecía conseguir ventaja. Fue entonces cuando Fernando III subió al trono alemán, y Luis XIV fue nombrado rey de Francia, ambos con ideas más cercanas a la paz que sus antecesores. Poco después, y tras una gran victoria de los franceses que lograron entrar hasta Viena, ambos bandos firmaron la paz, la cual fue especialmente beneficiosa para los franceses.
Consecuencias de la Guerra de los 30 años
Tras la guerra se firmaron unos tratados de paz, los cuales finalizaban el conflicto, y cambiaban el devenir de Europa para siempre. Estos acuerdos fueron la Paz de Westfalia, firmada en 1648, y la Paz de los Pirineos, firmada en 1658. Ambos acuerdos debilitaron en gran medida a los Habsburgo, y fortalecieron a los franceses, logrando cambiar la hegemonía de Europa, y provocando unos años más tarde el fin de los Habsburgo.
Explicación: