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La Ilíada es un libro extraordinario y aunque muchas de sus páginas están repletas de violencia narra una historia no solo por la conquista de Ilión, no solo por las riquezas, no solo por una hermosa mujer sino por el poder y la dignidad y el deseo de superioridad de cada uno de estos, estos son los principales temas que a continuación trataré en mi ensayo
Desde el rapto de la esposa de Menelao: Helena, por parte de paris y con la ayuda de Afrodita se generó una guerra extraordinariamente violenta entre Grecia y la ciudad de Ilión (o como muchos la conocen la ciudad de Troya) por recuperar a Helena.
A medida que leía el libro, apreciaba la cantidad de violencia, las numerosas y horrorosas muertes que sufrían los guerreros, como los grandes héroes casi inmortales sucumbían al ser atravesados por lanzas y flecha, y como hasta los mismos dioses sufrían debido a esta guerra y como su intromisión en esta guerra causa daños fatales a ambos bandos y a los mismo dioses.
Es difícil concebir que todo esto fue causado solo por una mujer muy hermosa y es difícil para mí no pensar “Todos estos hombres estaban dispuestos a morir solo para que Paris o Menelao se quedara con Helena” y pensaba que Helena debía ser una mujer demasiado hermosa y con alto valor sentimental para ambos pueblos para que ambos lucharan de esa manera por ella.
Pero a medida que avanzaba en la lectura del libro me di cuenta que ellos no solo peleaban por una mujer hermosa, ellos peleaban por la dignidad, peleaban para demostrar su poderío y su grandeza y Helena era el premio que sería dado al ganador.
Si paramos un segundo para pensar todas las tragedias que ha sufrido el mundo a través de los siglos y de los milenios solo por el deseo de los seres humanos de poseer el poder, las ideas que vendrían a nuestras cabezas serían tan numerosas que sería difícil contarlas.
Para mí es difícil creer que las personas están dispuestas a morir solo por alcanzar el poder y si revisamos los antecedentes de estas situaciones, podemos apreciar que en últimas instancias el poder siempre se va de las manos de quien lo posee y pasa a otros.
Como ejemplo podemos citar el caso de la segunda guerra mundial, en donde Hitler con deseo de poseer el resto del mundo fue capaz de asesinar millones de seres humanos y acabar con cualquier indicio de paz que hubiera en ese momento pero al final de todo esto murió arrinconado por las personas que alguna vez casi domino.
Muchos se preguntarán porque hablo de casos que se presentaron tan recientemente cuando la Ilíada se desarrolló miles de años atrás, y la razón para esto es muy sencilla, la búsqueda de poder por parte del ser humano siempre ha sido la misma sin importar el siglo o las ideologías y siempre ha tratado de alcanzar el mismo fin: Gobernar sobre los otros y demostrar la superioridad, lo único que ha cambiado a través de los años son los medios, las herramientas y las estrategias que se desarrollan para alcanzar el poder.
Por eso vemos que los guerreros tanto aqueos como teucros siguen peleando sin importar cuan exhaustos estén, sin importar cuantos de sus amigos yacían muertos a mano de otros, vemos como muchos se lanzaban contra el gran Héctor sabiendo que morirían inevitablemente y como el gran Héctor muere a manos de Aquiles y todo solo por el deseo de alcanzar la gloria, de ser llamados valientes y solo por la esperanza de resultar vencedores y ser recompensados con grandes riquezas y principalmente poder, poder sobre los otros guerreros, sobre los ciudadanos de Troya, poder sobre sí mismos.
La búsqueda de poder es algo común en los seres humanos y el querer tenerlo no es el problema, el problema se presenta en los medios que se usan para obtener ese poder y lo que se hace con ese poder cuando ya se posee.
La Ilíada es un ejemplo de como la búsqueda de poder puede llevar a dos grandes civilizaciones a la destrucción y a la muerte, pero también existen situaciones en la que la búsqueda de poder ha llevado a la prosperidad de los seres humanos, un ejemplo es la revolución francesa, en la cual se luchó por la libertad de los seres humanos, por el reconocimiento de la igualdad, la dignidad y el respeto y por el reconocimiento de los Derechos Humanos y la cual tuvo un buen final en la historia de la humanidad.
Así que para concluir el ensayo quiero invitar a todas las personas que leen este ensayo a buscar el poder de una manera positiva, a buscar el cambio, el éxito y la prosperidad de todos los seres humanos y a invitarlos a olvidar la violencia como una solución, porque la violencia tal y como pasó en la Ilíada solo deja muertes y destrucción a su alrededor.
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