EUROPA
¿Cuáles fueron las consecuencias políticas de las revoluciones liberales de 1848?
¿Cuál era el contexto económico de Europa entre 1845 y 1848?
¿En términos generales cuáles fueron los impactos en Austria, Alemania e Italia de las revoluciones de 1848?
¿Cuál corriente política encabezó las revoluciones de 1830 y 1848 en Europa?
¿Cuáles fueron los resultados sociales, políticos y económicos en Europa después de las revoluciones de 1830 y 1848?
¿Quién retoma el control de Francia después de la Revolución de 1848?,
¿Cuál fue el papel de Cesare Balbo y el Rey Carlos Alberto en la revolución de 1848 en
Italia?
¿Cuál es la importancia del reino de Piamonte-Cerdeña en la revolución de 1848 en Italia?
¿Cuál es la importancia del Parlamento de Frankfurt en la Revolución de 1848 en Alemania?
Respuestas
Las revoluciones liberales derivadas de los procesos políticos iniciados a finales del siglo XVIII produjeron cambios sustanciosos en la dinámica política de Europa central y un nuevo trazado territorial.
Entre 1845 y 1848 en Europa se experimentó una considerable recesión económica como resultado de la caída de algunas monarquías que sostenían la economía continental.
Las revoluciones de 1848 en Austria, Alemania e Italia produjeron procesos políticos mediante los cuales se experimentó un fomento de la identidad nacional y de la cohesión política, lo que derivó en la constitución de los Estados nacionales.
La corriente política que encabezó las revoluciones liberales de mediados del siglo XIX fue el republicanismo, en su modalidad continental liberal, que engendraría al socialismo utópico y más adelante también al científico.
Luego de las revoluciones políticas de mediados del siglo XIX en Europa se experimentaron serias inestabilidades sociales, crecimientos económicos dispares por el surgimiento de potencias nacionales que a su vez produjeron efectos políticos de confrontación por la divergencia de intereses territoriales y por las ansias de poder.
Luego del auge de Napoleón y los republicanos franceses, el poder en Francia es retomado por la dinastía de los Borbones, pero será por un breve momento en la historia.
Cesare Balbo y el Rey Carlos Alberto de Cerdeña fueron exponentes de una posición moderada en mitad del radicalismo desatado en Italia de nacionalismo, ellos sostenían que las reformas no debían trascender el ámbito necesariamente jurídico.
El Reino de Piamonte-Cerdeña fue fundamental en la unificación italiana, su poderío permitió el emprendimiento de la revolución de 1848, con Giusseppe Garibaldi a la cabeza.
El Parlamento de Francfort permitió, a través de la representación popular de los alemanes, de una transición pacífica hacia la unificación alemana.