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hace mucho tiempo en un pequeño pueblo existía un sastrecillo el sastrecillo no sabía que eran las normas de cortesía porque sus padres nunca se la habían enseñado en fin un día el rey mandó a llamar a que el sastrecillo para que le cosiera sus ropas sí que el sastre se presentó ante el rey y le preguntó en qué le puedo ayudar el rey muy indignado mandó al pequeño sastrecillo al calabozo el pequeño sastrecillo se encontraba muy asustado y sin saber qué hacer hasta que al fin le preguntó a uno de los presos que estaba con él porque había llegado hasta allí por eso le contesto yo igual que tu pequeño sastrecillo no hizo una reverencia ante el rey porque no sabía que eran las normas de cortesía por eso no encerraron aquí y hasta el día de hoy no he podido salir el sastrecillo más confundido que antes le volví a preguntar qué son las normas de cortesía el preso le contestó tampoco es sabido que son es una palabra muy rara pero a la vez te salvará la vida al fin y al cabo pasaron días y así es hasta que recibe un anuncio del rey que decía te perdono la vida si me traes tres pelos de oro del diablo en el inframundo el valiente sastrecillo en busca de aquellos pelos de oro al llegar a la puerta del inframundo entró como perro por su casa si ni siquiera tocar ni decir con permiso el de él estaba tan indignado que con gran furia le preguntó qué haces aquí sastrecillo le dijo vengo a quitarte tres pelos de oro de la cabeza al diablo se echó a reír sin consuelo y después se levantó seriamente y le dijo tú no sabes qué es ser Cortés el sastrecillo le dijo no no sé qué es pero por culpa de esa palabra he de llevar esos tres pelos al rey o me matará el diablo se conmovió de aquel pequeño sastrecillo y le enseñó que era la cortesía le enseñó la palabra con permiso por favor y gracias y cómo y para que se utilizaban haci que decidio regalarle también los tres pelos de oro si era cortes con el haci que el sastrecillo le dijo me podrías dar por favor aquellos tres pelos de oro que tienes en tu cabeza así que el diablo se los quitó y se los dio después el pequeño sastrecillo le dijo muchas gracias por tu colaboración y se marchó al llegar al Castillo del Rey le entregó los tres pelos de oro de la cabeza del diablo y así el rey le perdonó la vida pero también le preguntó cómo lo había hecho el pequeño sastrecillo le dijo ser Cortés agradable agradable y amable me ha salvado la vida aquellas tres palabras las llevaré en mi corazón y en mi mente siempre el rey como recompensa le dio todo su reino y a su bellísima hija la princesa Natalie el pequeño sastrecillo vivió muy feliz en el reino con su amada esposa y aquellas palabras de cortesía