Respuestas
Es permisible catalogar los valores intrínsecos de la ciudadanía como la antítesis del fundamentalismo. Básicamente porque la primera se edifica sobre el respeto y la tolerancia, principios necesarios para vivir en armonía y libertad. El fundamentalismo, en contraposición, se sustenta en filosofías religiosas absolutistas, totalitarismo político, prácticas sectarias, fascistas, supremacistas, que tienen como objetivo imponer la concepción vital de un grupo sobre todo y todos los demás, utilizando cualquier recuso para lograrlo, inclusive a través acciones intimidatorias y terroristas.
Frente a esta realidad contemporánea en auge, atizada y promovida alrededor de todo el mundo, la respuesta, en la medida posible, debe ser el ejemplo a través de la tolerancia activa, inclusiva, reconociendo el valor enriquecedor de las diferencias y la diversidad humana.