1. Tilda las palabras del fragmento de El Aleph de Jorge Luis Borges:
a) La candente mañana de febrero en que Beatriz Viterbo murio despues de una imperiosa
agonia que no se rebajo un solo instante ni al sentimentalismo ni al miedo, note que las
carteleras de fierro de la Plaza Constitucion habían renovado no sé qué aviso de cigarrillos
rubios; el hecho me dolio, pues comprendi que el incesante y vasto universo ya se apartaba
de ella y que ese cambio era el primero de una serie infinita. Cambiara el universo pero
yo no, pense con melancolica vanidad; alguna vez, lo sé, mi vana devocion la había
exasperado; muerta, yo podía consagrarme a su memoria, sin esperanza, pero tambien sin
humillacion.
b) Considere que el 30 de abril era su cumpleaños; visitar ese día la casa, la calle Garay para
saludar a su padre y a Carlos Argentino Daneri, su primo hermano, era un acto cortes,
irreprochable, tal vez ineludible. De nue
Respuestas
La cadente mañana de febrero en que Beatriz Viterbo murió después de una imperiosa agonía que no se rebajó un sólo instante ni al sentimentalismo ni al miedo, note que las carteleras de fierro de la Plaza Constitución habían renovado no sé qué aviso de cigarrillos rubios; el hecho me dolió, pues comprendí que el incesante y vasto universo ya se apartaba de ella y que ese cambio era el primero de una serie infinita. Cambiará el universo pero yo no, pensé con melancolía vanidad; alguna vez, lo sé, mi vana devoción la había exasperado; muerta, yo podía consagrarme a su memoria, sin esperanza, pero también sin humillación.
Consideré que el 30 de abril era su cumpleaños; visitar ese día la casa, la calle Garay para saludar a su padre y a Carlos Argentino Daneri, su primo hermano, era un acto cortés, irreprochable, tal vez ineludible.