Respuestas
1- Debe ser atractiva y acogedora: La decoración y el colorido, la disposición ordenada de sus elementos en el espacio, la amplitud, la luminosidad y la ventilación, todo debe de invitar a estar en la biblioteca con comodidad y una actitud positiva.
2- Orden y Limpieza y Organización: Las mesas, las sillas, las estanterías, los paneles informativos, los recursos informáticos, etc. Idealmente todo ello debería estar en buen estado y en su lugar correspondiente. Además la limpieza es esencial para evitar la acumulación del polvo y permitir el uso de todos los espacios incluyendo el uso del suelo.
3- Normas Claras y Sencillas: La biblioteca debe ser un lugar abierto y activo, pero no deja de ser una biblioteca, un espacio diferente al aula, al pasillo y al patio. Por ello se debe contar con una serie de normas básicas y sencillas que TODO EL MUNDO debe respetar, como no introducir comida, caminar despacio, no cambiar las cosas de sitio, solicitar el préstamo antes de sacar algún artículo, etc.
4- Dispone de un Sistema de Catalogación y etiquetado para buscar libros y realizar prestamos y devoluciones con rapidez y sin esfuerzo: Es sabido que existen programas de catalogación que realizan prestamos y devoluciones. El problema de estos programas son difíciles de usar, requieren a veces conocimientos avanzados de informática y son pocos atractivos.
5- Debe permitir el trabajo o el estudio individual, sin distracciones, con silencio; tanto el de los alumnos como el de los profesores: La biblioteca es un espacio ideal en el que poder aislarse del ajetreo, del resto del centro y cuando se necesita hacer un trabajo de máxima concentración.
6- No siempre ha de haber silencio parece contradictorio con el punto anterior pero no lo es: Hay momentos para todo, y en la biblioteca también pueden caber actividades grupales, proyectos de clase, reuniones de trabajo, proyecciones, presentaciones, conferencias, etc.
7- Fomenta otras actividades a parte de la lectura: La biblioteca es un espacio ideal para el trabajo, la reflexión y el aprendizaje. Por tanto, cualquier actividad relacionada con estos aspectos puede caber en ello, como en la escritura, el trabajo y los debates, etc.
8- Dispone de espacios diferenciados: Puesto que la biblioteca puede albergar distintas actividades, es apropiado que cuente con espacios o rincones diferenciados: Zonas de estudios y trabajo individual, espacio tecnológico para consulta y trabajo con ordenadores y tabletas, zona de trabajo y actividades grupales. Estos espacios pueden tener una delimitación física (cristaleras, pared, estanterías) o no, pero su uso debe tener ciertas normas para que se respete su finalidad.
9- Esta abierta a la dimensión lúdica: Las representaciones, los debates, las proyecciones de película o documentales; las secciones de juego de mesa (que también estimula la lecto-escritura y la socialización), todo ello fomenta un uso más diverso y enriquecedor de la biblioteca.
10- Puede estar abierta a los padres y al resto de la comunidad educativa. Esto a parte de involucrar a las familias y fomentar la lectura fuera del centro, favorece el desarrollo del sentimiento de comunidad y las iniciativas que promueven la lecto-escritura, dentro de la escuela y fuera de ella, además de que atenúa las fronteras entre la escuela y la sociedad.
Exito!
Debe ser atractiva y acogedora: la decoración y el colorido, la disposición ordenada de sus elementos en el espacio, la amplitud, la luminosidad y la ventilación; todo debe invitar a estar en la biblioteca con comodidad y una actitud positiva.
Orden, limpieza y organización: las mesas, las sillas, las estanterías, los paneles informativos, los recursos informáticos, etc. Idealmente todo ello debería estar en buen estado y en su lugar correspondiente. Además, la limpieza es esencial para evitar la acumulación de polvo y permitir el uso de todos los espacios, incluido el suelo si fuese necesario.
Normas claras y sencillas: la biblioteca debe ser un lugar abierto y activo, pero no deja de ser una biblioteca, un espacio diferente al aula, el pasillo o el patio. Por ello debe contar con una serie de normas básicas y sencillas que TODO EL MUNDO debe respetar, como no introducir comida, caminar despacio, no cambiar las cosas de sitio, solicitar el préstamo antes de sacar algún artículo, etc.
Dispone de un sistema de catalogación y etiquetado para buscar libros y realizar préstamos y devoluciones con rapidez y sin esfuerzo. Es sabido que existen muchos programas de catalogación que también realizan préstamos y devoluciones. El problema es que la gran mayoría de estos programas son difíciles de usar, requieren a veces conocimientos avanzados de informática y son poco atractivos. Es importante que gestionar el catálogo y los préstamos y devoluciones lo pueda realizar cualquier persona sin necesidad de tener que aprender procedimientos complejos. Para esta tarea, Proyecto Biblioteca es una herramienta ideal. Al permitir retirar ejemplares en préstamo para trabajar en el aula o en casa estaremos favoreciendo la máxima utilidad de los libros y otros artículos de la biblioteca.
Debe permitir el trabajo o el estudio individual, sin distracciones, con silencio; tanto el de los alumnos como el de los profesores. La biblioteca es un espacio ideal en el que poder aislarse del ajetreo del resto del centro cuando se necesita hacer un trabajo de máxima concentración.
No siempre ha de haber silencio. Parece contradictorio con el punto anterior, pero no lo es. Hay momentos para todo, y en la biblioteca también pueden caber actividades grupales: proyectos de clase, reuniones de trabajo, proyecciones, presentaciones, conferencias, etc.
Fomenta otras actividades aparte de la lectura: la biblioteca es un espacio ideal para el trabajo, la reflexión y el aprendizaje. Por tanto, cualquier actividad relacionada con estos aspectos puede caber en ella, como la escritura, el trabajo, los debates, etc.
Dispone de espacios diferenciados: puesto que la biblioteca puede albergar distintas actividades, es apropiado que cuente con espacios o rincones diferenciados: zona de estudio y trabajo individual, espacio tecnológico para consulta y trabajo con ordenadores y tablets, zona de trabajo y actividades grupales. Estos espacios pueden tener una delimitación física (cristaleras, pared, estanterías) o no, pero su uso debe tener ciertas normas para que se respete su finalidad.
Está abierta a la dimensión lúdica: las representaciones, los debates, las proyecciones de películas o documentales; las sesiones de juegos de mesa (que también estimulan la lecto-escritura y la socialización), todo ello fomenta un uso más diverso y enriquecedor de la biblioteca.
Puede estar abierta a los padres y al resto de la comunidad educativa. Esto, aparte de involucrar a las familias y fomentar la lectura fuera del centro, favorece el desarrollo del sentimiento de comunidad y la continuidad de las iniciativas que promueven la lectoescritura dentro de la escuela fuera de ella, además de que atenúa las fronteras entre la escuela y la sociedad.