Me podrían decir cuál es el argumento y qué moraleja tiene la obra de teatro “Petición de mano” de Antón Chéjov :)
Respuestas
El argumento de la obra “petición de mano” es que Iván Vassiliyitch Lomov le propone matrimonio a Natalia, la hija de su vecino Stepan Stepanovich Chubukov, recibe el consentimiento por parte del padre, trata de declararse a la joven, sin embargo el diálogo termina en disputa sobre la propiedad de unos terrenos entre ambas propiedades; Lomov, que es un neurasténico comienza a sentir "palpitaciones" y entumecimiento en la pierna.
Cuando el padre se da cuenta de que están discutiendo, expulsa a Iván de la casa, la chica al enterarse del motivo de la visita, sufre un ataque de nervios y le ruega a su padre que traiga a Lomov de regreso.
Cuando el pretendiente regresa a la casa, los jóvenes vuelven a discutir, esta vez sobre la superioridad de sus respectivos perros, el intercambio de argumentos, tiene como consecuencia un desmayo que sufre el pretendiente, por lo que padre e hija lo dan por muerto; éste “resucita” y el padre los apura a que se comprometan pues los novios a comenzado a discutir otra vez.
La moraleja es que no hay que involucrarse en discusiones ajenas y menos en la de parejas.
Respuesta:
El argumento de la obra “petición de mano” es que Iván Vassiliyitch Lomov le propone matrimonio a Natalia, la hija de su vecino Stepan Stepanovich Chubukov, recibe el consentimiento por parte del padre, trata de declararse a la joven, sin embargo el diálogo termina en disputa sobre la propiedad de unos terrenos entre ambas propiedades; Lomov, que es un neurasténico comienza a sentir "palpitaciones" y entumecimiento en la pierna.
Cuando el padre se da cuenta de que están discutiendo, expulsa a Iván de la casa, la chica al enterarse del motivo de la visita, sufre un ataque de nervios y le ruega a su padre que traiga a Lomov de regreso.
Cuando el pretendiente regresa a la casa, los jóvenes vuelven a discutir, esta vez sobre la superioridad de sus respectivos perros, el intercambio de argumentos, tiene como consecuencia un desmayo que sufre el pretendiente, por lo que padre e hija lo dan por muerto; éste “resucita” y el padre los apura a que se comprometan pues los novios a comenzado a discutir otra vez.
La moraleja es que no hay que involucrarse en discusiones ajenas y menos en la de parejas.
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