Respuestas
El arbol tiene su tallo y raíces ramificados para aumentar la superficie de absorción de luz solar y nutrientes del suelo, respectivamente. En el caso de las raíces, estas proporcionan también el sostén y fijación del arbol al suelo.
Las ramas que nacen del tallo de los árboles poseen las hojas -componente foliar- que es necesario para el proceso de obtención de energía solar y fostosíntesis. A medida que un arbol crece requiere mayor cantidad de energía, por lo que su superficie de absorción aumenta, incrementando sus ramas.
las raíces de un arbol tienen por función la fijación de este al suelo, además de absorber agua y minerales presentes allí, por lo que la superficie de fijación al suelo y absorción de nutrientes que este proporciona será mayor en función del tamaño del arbol y, en consecuencia, las raíces deben ramificarse y extenderse.