Respuestas
Nuestro entorno está conformado por seres u organismos vivientes, así como por materia inanimada. Los seres vivos lo componen las miles de especies de plantas y animales que existen en nuestro mundo. La materia inanimada o inerte es todo aquello que no tiene vida: el viento, las rocas, el agua, el suelo, etc. Los seres vivos pasan por un ciclo de vida: nacen, crecen, se reproducen y mueren. La materia inerte no tiene este proceso, aunque puede transformarse.
Entre los seres vivientes y la materia inanimada existen grandes diferencias que los distinguen. Veremos 6 importantes características que hacen esta distinción: metabolismo, reproducción, crecimiento, forma y tamaño, irritabilidad y composición química.
Metabolismo
Los organismos vivos requieren de una serie de procesos químicos llamado metabolismo. Estos procesos son esenciales para la vida de los seres vivos. Por ejemplo, para obtener energía, los seres vivientes ingieren y digieren los alimentos, estos son asimilados y utilizados por el cuerpo. Lo que ya no es útil se desecha a través del sistema excretor. La materia inanimada no ingiere o transforma otros materiales para obtener energía, aunque existen algunos materiales que liberan energía, como el caso de los elementos radiactivos.
Reproducción
Los seres vivos tienen la capacidad de producir otros seres de la misma especie, ya sea por reproducción sexual o por reproducción asexual. Mientras, la materia inerte carece de esta capacidad. De una piedra no va a nacer una piedrita.
Crecimiento
Los organismos vivos crecen por intususcepción, esto quiere decir que crecen de adentro hacia afuera, es una asimilación interna de los elementos. Desarrollan partes nuevas entre o dentro de las partes viejas. Los inanimados crecen por yuxtaposición, el crecimiento es por adición externa de materia, como por ejemplo los cristales.
Forma y tamaño
La forma y el tamaño de los seres vivos están determinados y definidos por la especie. Podemos distinguir los animales y las plantas por su forma. Por ejemplo, un gato es muy diferente a un elefante, y cuando los conocemos podemos distinguirlos fácilmente. En la materia, la forma y el tamaño pueden ser variados dentro de la misma categoría de la materia. La excepción está en los cristales, los cuales tienen formas constantes aunque varían en tamaño.
Irritabilidad
La irritabilidad es la capacidad de reaccionar a cambios en el medio ambiente. Esta reacción puede ser diversa, y la intensidad de la misma no necesariamente es proporcional a la magnitud del estímulo. En los materiales inertes, la reacción es proporcional al estímulo, puede estar definida cuantitativamente. Por ejemplo, un material se dilata (reacción) cuando recibe calor (estímulo), pero la dilatación dependerá de la cantidad de calor recibida.
En estos videos vemos como la irritabilidad funciona en un ser vivo y en una materia inanimada. En el primero vemos cómo la planta reacciona al contacto físico. En el segundo podemos observar cómo la arandela se dilata (cambia de volumen como resultado del cambio en la temperatura) y vuelve a su estado natural cuando enfría.
Composición química
Los seres vivos están compuestos principalmente por: carbono (C), hidrógeno (H), oxígeno (O), nitrógeno (N) en proporciones variadas pero definidas. También contienen otros elementos en pequeñas cantidades. Cuando éstos elementos se combinan con carbono, forman moléculas orgánicas complejas, constituyendo la sustancia viva (protoplasma) de los seres vivos. En la materia inanimada se pueden encontrar estos elementos, pero forman moléculas más pequeñas e inorgánicas.