Respuestas
El terreno de juego debe ser de campo natural o artificial, aunque esta opción puede depender del reglamento de la competición. El terreno tendrá forma rectangular, siendo su largo entre 90 y 120 m (de 100 a 110 m para partidos internacionales), y su ancho entre 45 y 90 m (de 64 a 75 m para partidos internacionales). Todo el perímetro del terreno estará señalizado mediante líneas de 12 cm de ancho como máximo: las dos líneas más largas se denominan líneas de banda, mientras que las dos más cortas serán las líneas de meta (o de fondo). El campo se divide en dos mitades mediante una línea paralela y equidistante a las líneas de meta
Es un momento dramático en un partido de fútbol cuando el árbitro llama a un tiro penal. Cuando un defensor comete una falta en el área penal, se interrumpirá el juego y a un jugador ofensivo se le da un tiro a la portería solo ante el portero que juega de defensa. Los árbitros pueden tomar medidas disciplinarias en el campo, que van desde la concesión de tiros libres a la descalificación, cuando una falta de una de cinco áreas es cometida.
Jugada peligrosa
La FIFA, el organismo rector internacional del deporte, establece las Reglas de Juego. Estas reglas se han adoptado en todo el mundo por las federaciones y organizaciones nacionales como el US Soccer. La ley 12 cubre faltas y faltas de conducta, incluidos aquellos "considerados por el árbitro de ser imprudentes, temerarios o con fuerza excesiva". Estas jugadas, donde un jugador patea, hace una zancadilla, salta a, carga, golpea, o empuja con fuerza a otro jugador, resulta en un tiro libre directo. En esta situación, un jugador puede tiran directamente hacia la portería. Los árbitros pueden conceder un tiro libre indirecto, una patada tras un paro donde un jugador puede pasar el balón en cualquier lugar que elija. Jugadas particularmente ofensivas pueden darle al jugador una tarjeta amarilla, o una advertencia. La conducta violenta gana una tarjeta roja y expulsión inmediata.
Falta de respeto
Las leyes requieren que los jugadores muestren un buen espíritu deportivo en todo momento durante el partido y las sanciones por no hacerlo son graves. Escupir a un adversario resulta en una tarjeta roja y tiro libre directo. Una tarjeta roja también se muestra a cualquier jugador que use lenguaje o gestos ofensivos o abusivos, o cometa "una jugada de falta grave", según el criterio del árbitro. La conducta antideportiva o cuestionar la decisión del árbitro con palabras o acciones se sancionará con tarjeta amarilla.