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El barroco nace en Europa, desarrollándose principalmente en Italia a inicios del siglo XVII, extendiéndose hasta mediados del siglo XVIII. Aunque de origen europeo, este movimiento tuvo gran influencia en las colonias americanas existentes para la época.
Las etapas del barroco representadas por tres obras
El movimiento barroco engloba prácticas y expresiones como la arquitectura, la música, la pintura, la escultura, la literatura, la danza y el teatro.
Se considera que su influencia para la época iba mucho más allá de ser un estilo o corriente artística, con implicaciones sociales y políticas determinadas. Fue considerado por la aristocracia como un medio para sorprender.
El barroco fue promovido por la Iglesia Católica, en Europa, principalmente. Las principales manifestaciones artísticas comenzaron a adoptar temáticas religiosas y opulentas en sus contenidos, con victorias y presencia de personajes divinos.
Este movimiento se dividió en tres etapas principales a lo largo de su existencia: barroco temprano o primitivo, entre los años 1590 y 1625; barroco pleno, entre 1625 y 1660; y barroco tardío, entre 1660 y 1725, última etapa que dio paso al otro movimiento: el rococó.
Hoy en día aún se pueden apreciar manifestaciones barrocas o versiones influenciadas por corrientes más modernas.
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Distintas Etapas del barroco
Barroco temprano (1590 – 1625)
El barroco se origina en Italia, y una de las primeras formas expresivas en adoptar sus elementos fue la pintura.
Surge bajo la influencia de la Iglesia Católica Romana, cuyas reformas internas permitieron implementar nuevos lineamientos hacia los contenidos de las artes y su función.
Para ese entonces, los pintores más reconocidos competían constantemente por los encargos asignados por la Iglesia, por lo que fueron los primeros en adoptar estos nuevos cambios estéticos.
Entre esos cambios, una iconografía mucho más directa, obvia y teatral, que exaltase los valores eclesiásticos y que fuese capaz de llegar no solo a los intelectuales, sino a los iletrados.
Según los expertos, el barroco inició como una reacción de la Iglesia frente a movimientos culturales revolucionarios y con idea más liberales.
No obstante, Roma fue el epicentro de su exitoso desarrollo, donde la arquitectura tomó mayor protagonismo en los espacios públicos y marcó la identidad urbana del momento, conservada hasta hoy.
En las primeras manifestaciones plásticas del barroco dominaba la asimetría, la centralización en lugar de la composición.
La intensidad e importancia del color le brindó un rasgo distintivo frente a otras obras del momento. Caravaggio es uno de los representantes de esta primera etapa.
El teatro daría unos tímidos primeros pasos al inicio del barroco, sin saber que se estaría encaminando hacia su consolidación durante las siguientes etapas, al punto de convertirse en una experiencia multisensorial.
Barroco pleno (1625 – 1660)
Durante este periodo, el barroco se consolidó como movimiento en una mayor cantidad de artes, así como de países.
La arquitectura barroca comenzó a manifestarse en todo su esplendor en distintas ciudades de Italia y España. La pintura proliferó por toda Europa; Diego Velázquez fue uno de los pintores más prominentes de este periodo y del barroco en general.
La arquitectura barroca marcó la tendencia de una gran cantidad de edificaciones europeas e inclusive latinoamericanas.
Se enfocaba en grandes ornamentos, así como en la fijación de domos e interiores altamente vistosos, con sucesiones de habitaciones amplias que finalizaban en una habitación maestra.
La literatura trajo nuevas posibilidades a esta corriente. Algunos de los máximos representantes europeos provinieron de Inglaterra, España y Francia, como William Shakespeare, Pedro Calderón de la Barca y Jean Racine. Entre los géneros literarios más populares se encontraban la dramaturgia y la poesía.
El caso de España es particular, ya que se considera que durante la época del barroco se desarrolló lo que se conocería como el Siglo de Oro de la literatura española, con la aparición de, entre otros autores, Miguel de Cervantes, el primer novelista.
El periodo pleno del barroco no solo se centró en las artes expresivas; sus elementos fueron tomados como objeto de estudio y reflexión por parte de una generación de filósofos como René Descartes, John Locke, Francis Bacon.
Fue una etapa en la que se desarrolló el pensamiento mixto: la combinación de nuevas ideas con las viejas tradiciones religiosas.
Barroco tardío (1660 – 1725)
Según algunos historiadores, la tercera y última etapa del barroco a veces no es considerada como tal, sino como el inicio del siguiente movimiento: el rococó.
No obstante, hay quienes afirman que hubo manifestaciones durante este periodo consideradas esencialmente barrocas. Se han encontrado características determinadas en las obras de esta etapa de transición.