Respuestas
Idealmente, si a fin de año la inflación fue mayor al aumento salarial acordado, debería haber un nuevo aumento que compense la diferencia. Por ejemplo, si la paritaria es del 15%, pero a fin de año la inflación total fue del 20%, automáticamente debería haber un nuevo aumento del 5%. La característica de “automático” no es menor: no depende de una nueva negociación de las partes, dado que ya fue fijado con anterioridad.
De esta manera, se asegura que el poder adquisitivo del salario no caiga por efecto de la inflación. Esto es, que con el mismo sueldo se puedan comprar la misma cantidad de bienes y servicios que un año atrás (lo que sería la situación normal en un país sin alta inflación, claro). Eso se llama mantener el “salario real” constante.