Respuestas
Diálogo entre dos vecinos (Don Pochito y Don Pereyra):
- ¡Epa, amigo! Casi me voltea.
- Disculpe, don Pereyra. ¿Cómo anda?
- Yo muy bien. Pero usted parece preocupado…
- Sí. Me cortaron el gas porque me olvidé de pagar la factura. Ahora tengo que ir a la compañía para pedir la reinstalación del servicio.
- ¡No me diga! Con todas las preocupaciones que uno tiene… Un bajón. Por suerte, a mí me hace los trámites mi hija.
- No sabía que tenía una hija…
- Se llama Sandra. Quizás la vio por aquí alguna vez.
- ¡Ah! ¿La chica que vende ropa es su hija? Dígale que vaya a casa. Ojalá que me haya traído el chalequito que le encargué.
- Bueno. Ya estará por llegar. ¡Lo veo luego, don Pochito!
Diálogo entre dos amigos (Claudio y Fernando):
- ¡Fernando!
- ¿Cómo andas? ¿Vos me llamaste hoy a la tarde? Te iba a hablar antes pero no tenía crédito.
- Quédate tranquilo. ¿Vas a venir al asado del sábado?
- ¡Sí! Ya hablé con los muchachos.
- Te habrán dicho que estamos juntando la plata para comprar la carne y las gaseosas…
- ¿Quién va a hacer las compras?
- Miguelito. Además, va a hacer el asado. ¡Es un genio!
- Ojalá que ese día no llueva.
- No creo... Posiblemente haga calor. Lo leí en el pronóstico meteorológico de esta mañana. Yo pongo por vos la plata y después me devuelves.
- ¡Siempre sacándome de apuros!
- Me extraña. ¡Los amigos son los amigos! Bueno, ¿me pasas a buscar el sábado?
- ¡Listo! Nos vemos, Claudio. Estoy agotado.
- Chau. ¡Que descanses! Ven temprano mañana.
Diálogo entre dos amigos (Lucas y Carlitos):
--Hola, Carlitos... ¿Qué haces? ¡Qué cara! No me digas que vos me andabas buscando…
--Sí, amigazo, espero no molestarte. Mira, necesito que me hagas un gran favor, porque ando con algunos problemitas en el auto.
--¿Qué te ha pasado?
--Parece que me he quedado sin batería. Lo tengo aquí a la vuelta, en la vereda de la biblioteca.
--¡Ojalá que no sea nada serio! Dime cómo te puedo ayudar.
--Yo me voy con el Flaco al taller. Búscame ahí dentro de una hora, así vaya al centro con vos, en tu camioneta.
--Bueno, espérame a eso de las siete. ¿Te parece bien?
--Sí, claro, Lucas... ¿Y vamos a tomar un cafecito?
--¡Listo! Nos vemos.
--Chau.
Los tres diálogos son coloquiales, es decir que los interlocutores tienen una relación y un intercambio comunicativo informal y distendido. Además, ocurren en situaciones comunicativas o contextos cotidianos.
Observa el uso de las expresiones (¡Ah!, ¡Es un genio!, ¡Qué cara!), los diminutivos (chalequito, problemitas, cafecito), el aumentativo afectuoso (amigazo), los términos informales (plata, bajón, agotado), los apodos (Pochito, Flaco),