Respuestas
la utilización de un vaso que ha sido guardado previamente en el congelador, de manera que esté aún más frío que la cerveza al momento de servir esta bebida.
¿El resultado? Bueno, al tomar el vaso con las manos y al entrar en contacto con la boca es obvio que se siente que se está tomando una cerveza extremadamente helada, mucho más que si el vaso estuviera a temperatura ambiente y no hubiese estado guardado en el congelador. Sin embargo, debo decirles que esto es solo eso: una sensación al tacto y al roce con los labios, nada más.
¿Por qué sucede esto? Básicamente porque la cerveza, una vez que se sirve y entra en contacto con la temperatura ambiente, va subiendo -valga la redundancia- de temperatura sin importar demasiado las condiciones del vaso en que esté. Es decir, a lo más una vaso congelado ralentiza algunos segundos esta subida de temperatura. Pero nada más que eso.
Espero que te sirva