Respuestas
Respuesta dada por:
2
Desde
Cristóbal Colón en adelante, cada una de las sucesivas expediciones
europeas tenían como finalidad el hallazgo del tan ansiado oro. No
escaparon a esta fiebre ni siquiera los monarcas de la vieja Europa, los
que financiaron la mayoría de las expediciones al Nuevo Mundo con esa
finalidad. Los registros históricos demuestran que las coronas de
España, Portugal, Francia e Inglaterra dieron especial importancia a
aquella clase de expediciones.
Debido al enorme riesgo que significaba por aquellos días esa clase de viajes, es evidente que quienes los realizaban eran aventureros cuya única meta era la de enriquecerse fácilmente, y que no repararían en los medios para conseguirlo. Es de esta forma que comienza la exploración del nuevo continente. En 1530, tan solo 38 años después del descubrimiento de América, las expediciones españolas se adentraron en territorio de la actual Colombia fundando poblaciones y sometiendo a las tribus locales. Gonzalo Jiménez de Quesada y Sebastián de Belalcázar, fundadores de la ciudad de Bogotá, se enteraron de una leyenda local en la que una antigua tribu, probablemente los Chibchas, ungían a su nuevo rey con una ceremonia especial.
Esta ceremonia consistía en revestir al heredero con polvo de oro habiendo revestido su cuerpo previamente con lodo, construir una gran balsa en la que se embarcaba el futuro rey con cuatro de sus principales jefes y una gran cantidad de gonzalo jiménez de Quesadaofrendas en oro en un lago profundo. Cuando el nuevo rey llegaba al centro del lago, arrojaba al fondo del mismo las ofrendas y se bañaba en él, de forma que el polvo de oro que revestía su cuerpo también fuera ofrendado.
Otra leyenda sobre El Dorado está relacionada con el imperio incaico, el más rico y mejor organizado de América del Sur. Cuando llegaron los conquistadores, ocuparon la capital y apresaron al Inca Atahualpa. Dice la leyenda que, cuando algunos súbditos del Inca se enteraron de la caída de su rey, tomaron la mayor parte del tesoro del imperio y lo arrojaron al fondo de un lago.
Debido al enorme riesgo que significaba por aquellos días esa clase de viajes, es evidente que quienes los realizaban eran aventureros cuya única meta era la de enriquecerse fácilmente, y que no repararían en los medios para conseguirlo. Es de esta forma que comienza la exploración del nuevo continente. En 1530, tan solo 38 años después del descubrimiento de América, las expediciones españolas se adentraron en territorio de la actual Colombia fundando poblaciones y sometiendo a las tribus locales. Gonzalo Jiménez de Quesada y Sebastián de Belalcázar, fundadores de la ciudad de Bogotá, se enteraron de una leyenda local en la que una antigua tribu, probablemente los Chibchas, ungían a su nuevo rey con una ceremonia especial.
Esta ceremonia consistía en revestir al heredero con polvo de oro habiendo revestido su cuerpo previamente con lodo, construir una gran balsa en la que se embarcaba el futuro rey con cuatro de sus principales jefes y una gran cantidad de gonzalo jiménez de Quesadaofrendas en oro en un lago profundo. Cuando el nuevo rey llegaba al centro del lago, arrojaba al fondo del mismo las ofrendas y se bañaba en él, de forma que el polvo de oro que revestía su cuerpo también fuera ofrendado.
Otra leyenda sobre El Dorado está relacionada con el imperio incaico, el más rico y mejor organizado de América del Sur. Cuando llegaron los conquistadores, ocuparon la capital y apresaron al Inca Atahualpa. Dice la leyenda que, cuando algunos súbditos del Inca se enteraron de la caída de su rey, tomaron la mayor parte del tesoro del imperio y lo arrojaron al fondo de un lago.
Respuesta dada por:
2
Colombia
Esta historia comienza en la ciudad de Guatavita, muy cerca de la actual. Es la historia de un cacique cuya mujer fue sorprendida en adulterio y por esto, condenada al peor de los suplicios: día y noche era perseguida por un grupo de indios que cantaban coplas relatando su delito con todos los detalles. No paraban de atormentarla.La desesperación y la culpa hicieron que se lanzase a una laguna, donde murió ahogada junto a su pequeña hija. Tras los sucesos, el cacique se llenó de remordimientos y quiso expiar la muerte de su esposa pidiendo consejo a los sacerdotes de confianza. Éstos le dijeron que su mujer vivía todavía y que habitaba en un hermoso palacio situado en el fondo de la laguna; que su alma estaría salvada si le ofrecía todo el oro del mundo.Así lo hizo durante varias veces al año. Los indios portaban las ofrendas y las lanzaban al agua, siempre de espaldas, mientras el cacique se desnudaba y cubría su cuerpo de un pegamento natural. Se rociaba con oro en polvo, luego subía a una balsa y se internaba hasta el medio de la laguna donde se entregaba a lamentos y oraciones. Después se bañaba para dejar el oro en polvo que cubría su cuerpo. El ritual se repitió sucesivamente de manera infinita.Y así fue como comenzó la leyenda del Dorado, nunca se supo ubicar exactamente la laguna pero los conquistadores más ambiciosos perdieron su paciencia, y algunos la vida, por encontrar este legendario tesoro.
Esta historia comienza en la ciudad de Guatavita, muy cerca de la actual. Es la historia de un cacique cuya mujer fue sorprendida en adulterio y por esto, condenada al peor de los suplicios: día y noche era perseguida por un grupo de indios que cantaban coplas relatando su delito con todos los detalles. No paraban de atormentarla.La desesperación y la culpa hicieron que se lanzase a una laguna, donde murió ahogada junto a su pequeña hija. Tras los sucesos, el cacique se llenó de remordimientos y quiso expiar la muerte de su esposa pidiendo consejo a los sacerdotes de confianza. Éstos le dijeron que su mujer vivía todavía y que habitaba en un hermoso palacio situado en el fondo de la laguna; que su alma estaría salvada si le ofrecía todo el oro del mundo.Así lo hizo durante varias veces al año. Los indios portaban las ofrendas y las lanzaban al agua, siempre de espaldas, mientras el cacique se desnudaba y cubría su cuerpo de un pegamento natural. Se rociaba con oro en polvo, luego subía a una balsa y se internaba hasta el medio de la laguna donde se entregaba a lamentos y oraciones. Después se bañaba para dejar el oro en polvo que cubría su cuerpo. El ritual se repitió sucesivamente de manera infinita.Y así fue como comenzó la leyenda del Dorado, nunca se supo ubicar exactamente la laguna pero los conquistadores más ambiciosos perdieron su paciencia, y algunos la vida, por encontrar este legendario tesoro.
Preguntas similares
hace 7 años
hace 7 años
hace 9 años
hace 9 años
hace 9 años
hace 9 años
hace 9 años