Respuestas
Cuando ayudas a alguien tu cerebro recibe una sensación de recompensa, lo que genera una sensación de bienestar y plenitud maravillosa.
2. Se eleva tu autoestimaSaber que eres apto de apoyar a otra persona lo que te hace estar más seguro de ti mismo y tu interacción social mejora.
3. Fortaleces tus amistadesAyudar a tus compañeros, amigos o quien sea te llevará a generar amistades nuevas y/o a fortalecer los lazos de amistades que ya existían. Las personas siempre se acuerdan de quienes estuvieron ahí cuando más lo necesitaron.
4. Te evalúas mejorAyudar a otros progresará la forma en la que tú mismo te ves. Científicamente está demostrado que ser caritativo te hace ser una persona más optimista y positiva.
5. Mejora la percepción de tus límitesLas personas que ayudan a otros de forma desinteresada reconocen sus capacidades, pero también sus límites. Saben que dar no es siempre fácil porque requiere de sacrificios personales. Por eso establecen sus límites, pero siempre teniendo en cuenta que la satisfacción que les trae el “dar” es insuperable.
6. Desarrollas un sentimiento de pertenenciaTodos somos uno.
Ayudar a una o más personas genera un sentimiento de sociedad que te acerca a los demás. Además todos sienten que están trabajando por una sola causa, lo cuál crea lazos fuertísimos de compañerismo.
7. Desarrollas paz interiorCuando ayudas a otros reduces el estrés y aumentas la sensación de logro y autorealización. Tienes una buena autoevaluación y por ende te es más fácil encontrar paz interior.
8. Sabes ser más agradecidoAyudar a otros te enseña que hay personas que están en una situación menos saludable que la tuya y así valoras más lo que tienes. Agradecer es una práctica muy asociada a la felicidad, por lo que ayudar también te ayudará a ser una persona más feliz.
9. Te renuevaAl ayudar nos dejamos de concentrar un rato en nosotros mismos y ponemos nuestra atención sobre otro. El enfocar nuestra mente y energía en otro contribuye a la sensación de renovación y revitalización de nosotros mismos.
10. Desarrollas armonía en el medio que te encuentrasCuando ayudamos tenemos una sensación de disposición, de amor, respeto y buena voluntad que contribuye a la armonía del entorno.