Respuestas
Hace poco leí un libro llamado, “La estrategia del Cid” donde la autora, María López Herranz, plantea las cinco claves que hicieron del Cid Campeador un líder aclamado. No sé cuanto hay de leyenda en la historia de Rodrigo Díaz de Vivar, pero siempre me han resultado inspiradores los personajes históricos. Creo que en cualquier figura histórica hay muchas cosas que aprender.
Veamos cuales son las cinco cualidades que hacían que el Cid fuese un líder:
Marca personal: Sin duda que el Cid gozaba de ella, de hecho casi 1000 años después conocemos sus hazañas.
Y tu ¿que representa tu marca personal?, ¿te lo has planteado alguna vez?. Puede ser un buen momento para plantearte, que transmites, y aprovechar para preguntarle a personas cercanas que te digan que cualidades destacarían de ti, y ver si coinciden con las que tu crees que proyectas.
El liderazgo: El campeador incluso desterrado consiguió que le siguieran sus hombres. Gozaba de poder y autoridad. En el libro la autora nos plantea que la autoridad está apoyada en la capacidad moral para dirigir, aconsejar y emitir opiniones cualificadas, ganada día a día a través de la generación de confianza y la demostración de determinadas competencias, habilidades y valores que otorgaban a quien los poseía una legitimación social fuera de toda duda. Frente al poder que lo otorga simplemente el cargo que ostenta.
En tu caso, en que apoyas tu liderazgo, ¿en tus competencias o en tu cargo?
La motivación: Nos cuenta la escritora, que cuanto hizo Rodrigo Díaz de Vivar durante su vida tuvo un claro reflejo en la motivación de sus seguidores. Sus principios eran admirados, respetados e imitados. Confiaban en él y en su proyecto, y nunca dejó de darles razones para seguir a su lado. Reconocía y premiaba el trabajo de sus hombres sin dejar de fomentar el espíritu de equipo.
Además el Cid se rodeó de los mejores y sabía delegar cuando el momento lo requería.
Para motivar los primeros que debemos estar motivados somos nosotros como líderes de nuestra organización, y en ocasiones eso no ocurre, aunque trataremos la motivación en futuros post, es interesantes que nos planteemos si estamos motivados y si motivamos a nuestros colaboradores. En ocasiones será suficiente al menos con que no los desmotivemos.
Las alianzas: El Cid, comprendió desde siempre el valor de las alianzas, en una España dividida en reinos gobernados por cristianos y musulmanes. Buscar objetivos comunes y sinergías, y establecer relaciones fluidas y duraderas son claves fundamentales para una gestión adecuada de cualquier empresa, y lo demuestra ya nuestro amigo Rodrigo en el siglo XI.
Recuerda siempre establecer alianzas y negociaciones basadas en el win win (ganamos todos).
La recompensa: Por último López Herranz nos narra cuan generoso era el Cid Campeador con sus huestes por luchar a su lado, contribuyendo con su esfuerzo al éxito de sus campañas de guerra.
Punto clave en la motivación de nuestros colaboradores, que serán clave en la consecución de nuestros objetivos. Recuerda que la recompensa no tiene porqué ser siempre económica, a veces un reconocimiento vale más que un puñado de euros. Pero no olvides nunca recompensar el esfuerzo de quien con su trabajo encumbra tu éxito.
Definitivamente parece que el Cid Campeador era un gurú de la gestión de personas, y un ejemplo inspirador para aquellos que nos enfrentamos cada día a nuestras propias batallas.
¿Eres de los que te inspiras en personajes históricos o públicos para tu estilo de liderazgo? ¿Quien te inspira?