Respuestas
En el cuerpo humano se encuentra medios donde el pH oscila dentro de un estrecho margen para que haya un correcto funcionamiento de las actividades vitales. Así la sangre tiene un pH entre 7,35 y 7,45; y no puede superar el pH = 7,8. La sangre tiene un pH extraordinariamente estable debido a los sistemas amortiguadores que contiene, entre los que destacan el dihidrogenofosfat/hidrogenofosfat, H 2 PO 4 -/HPO 4 2-, y el ácido carbónico/hidrogenocarbonato, H 2 CO 3 / HCO 3 -.
La saliva tiene un pH óptimo neutro y oscila entre 6,5 y 7,5. El jugo gástrico tiene un pH muy ácido, entre 1,0 y 3,0, con un valor óptimo de 1,8. Estos valores tan bajos permiten realizar la función digestiva a la vez que destruyen bacterias: por ejemplo los enterococos mueren a un pH inferior a 2,4. También la piel tiene un pH ácido (3,5 a 4,0) que le confiere una acción desinfectante. El jugo pancreático es alcalino, entre 8,5 y 8,9 unidades de pH. La bilis tiene un pH prácticamente neutro 6,8-7,0. En el intestino el pH oscila entre 7,0 y 8,0. Las lágrimas y la sudor tienen un pH aproximadamente de 7,2. El semen tiene un pH que va de 7,2 a 8,0 y los espermatozoides pierden su movilidad por debajo de 6,0 y además de 10,0 unidades. El flujo vaginal, en cambio, es ácido, entre 4,4 y 5,6 unidades de pH, lo que evita la entrada de gérmenes no habituales. La orina tiene un pH que varía entre 4,8 y 8.4. La leche entre 6,6 y 7,6.