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Vivimos en un mundo cada vez más contaminado, y constantemente estamos expuestos a gran cantidad de bacterias y virus, fáciles de adquirir al contacto diario con las personas que compartimos en la casa, oficina, escuela, en la calle, transporte público, de las cuales muchas de ellas pueden afectar gravemente nuestra salud.
Al estar expuestos a la contaminación de la vida diaria, es imposible evitar que seamos portadores de bacterias, pero si es posible mantenernos a salvo, y tratar de contrarrestarlas, de ahí la importancia de usar un gel antibacterial, una manera práctica, antiséptica, sin necesidad de usar agua para limpiar nuestras manos.
Gracias a su acción desinfectante y antiséptica comprobada, el gel antibacterial tiene la capacidad de eliminar el 99,9% de los microorganismos normales de nuestras manos, lo que significa que nos protege de enfermedades como la gripe, el virus H1N1 y la influenza.
Por estar libre de fragancias, colorantes y fabricado con materias primas biodegradables su aplicación no contamina el medio ambiente.
El gel antibacterial es de uso práctico y sencillo, limpia las manos sin necesidad de usar agua, jabón y toalla. Basta con aplicar una cantidad sobre la palma, frotar las manos, esparcirlo sobre todo en las palmas y yemas de los dedos; por último, dejarlo secar sin agitar las manos.
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