una reflexión sobre una chiquita que va a visitar a su padre en la cárcel
Respuestas
Respuesta:
Llevar o no a los niños a visitar a los padres a la cárcel es una decisión difícil de tomar. Depende de muchas
cuestiones, como la economía familiar, la política de seguridad de los penales, el costo o la disponibilidad
de transporte, la distancia del lugar de residencia al penal y la preferencia del padre privado de libertad.
Existen muy pocas investigaciones que evalúan los efectos a largo plazo en la relación
paterna/materno-filial que generan las visitas al penal para ver a sus padres. Sin embargo, estas
investigaciones demuestran que mantener una relación cercana con los padres encarcelados conlleva
efectos positivos para niños, padres y cuidadores1
.
Las observaciones realizadas por aquellos que trabajan con las familias de personas encarceladas
muestran que la mayoría de los niños manejan mejor la crisis del encarcelamiento parental cuando visitan
regularmente a sus padres. Para muchos niños la comunicación constante con sus padres puede hacer
disminuir el sentimiento de angustia que genera la separación, dándoles además la oportunidad de hablar
sobre sus sentimientos y, de este modo, poder sobrellevar mejor el dolor y la pérdida.
esto lo que me recuerdo de la última bes que leei