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1. Llevar una vida sedentaria
Realizar poca o ninguna actividad física, es uno de los hábitos más perjudiciales y comunes en la gente. De hecho, según una encuesta realizada en 2017, el 86,7% de la población chilena es sedentaria.
¿Qué riesgos están involucrados? Muchos y tienen que ver con la aparición de problemas serios, como la pérdida de masa muscular y resistencia, debilitamiento de los huesos, deficiencia en el sistema inmunitario, desequilibrios hormonales, inflamación, ralentización del metabolismo, entre otros.
¡Así que párate, camina o ponte a correr! Existen muchas actividades entretenidas para comenzar a mover tu cuerpo en la ciudad y así reducir la aparición de enfermedades.
2. No dormir lo suficiente
De acuerdo con el doctor Carles Gaig, de la Sociedad Española de Neurología (SEN) “dormir es fundamental para nuestra salud física y mental y este sueño debe ser de calidad y con una duración adecuada”. El sueño es un proceso esencial para la reposición de energías, el aprendizaje y la formación de recuerdos, el crecimiento y el fortalecimiento del sistema inmune.
¿Te ha tocado dormir poco? Probablemente sientas al día siguiente cansancio e irritabilidad. Si esto se incluye entre los malos hábitos personales -no dormir entre 7 y 8 horas diarias- puedes sufrir cuadros de depresión, ansiedad, además de problemas al corazón, presión alta, accidentes cerebrovasculares, etc.
3. Uso excesivo de la tecnología
Está bien, la tecnología entrega innumerables soluciones. No obstante, el uso desproporcionado de las herramientas tecnológicas -como el smartphone, la televisión o el computador- resulta nocivo para la salud.
Según el dispositivo, su “adicción” puede ocasionarte estrés visual, problemas de audición, dificultades para conciliar el sueño, sedentarismo, problemas en las articulaciones e, incluso, alteraciones en tu estado de ánimo.
4. Comer comida chatarra
Por lo general, en la mayoría de las ciudades abundan franquicias de comida rápida o chatarra. Por eso, es conveniente evitar los malos hábitos personales relacionados con la alimentación y tratar de llevar un estilo de vida saludable, dejando de lado las grasas saturadas y el exceso de calorías. Así, mantendrás alejada la obesidad y el aumento de peso (y los problemas derivados a ello).
5. Beber en exceso y fumar
De acuerdo con la OMS, el cigarro mata a 8 millones de personas al año como mínimo. Por otro lado, el consumo excesivo de alcohol provoca daños severos y que también pueden ser, en el largo plazo, mortales. De ahí que, si quieres evitar enfermedades por malos hábitos, no fumar y reducir la ingesta de alcohol deben ser parte de tus prioridades.
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