porque los lazos de consaguinidad no garantizan automaticamente los lazos de solidaridad que deberia caracterizar a una familia?
Respuestas
Respuesta:
Se puede distinguir, por lo tanto, entre el parentesco por consanguinidad y el parentesco por afinidad. Estas nociones son importantes en el terreno jurídico ya que determinan cómo se establecen los derechos vinculados a la familia.
Los grados de consaguinidad son especialmente importantes dentro del ámbito laboral a la hora de poder disfrutar de permisos por las personas con las que se tienen aquellos. Es decir, para poder hacer uso de permisos por nacimiento, enfermedad, fallecimiento…
En este caso se establecen varios tipos de grados de consaguinidad:
-Primer grado, en el que se encuentran el padre, la madre, el hijo o la hija.
-Segundo grado, donde se enmarcan el abuelo, la abuela, el hermano, la hermana, el nieto o la nieta.
-Tercer grado. En este están el tío, la tía, el bisabuelo, la bisabuela, el biznieto o la biznieta así como el sobrino y la sobrina.
-Cuarto grado, donde se hallan los tíos abuelos y los primos.
A la hora de solicitar determinados permisos también deben tenerse en cuenta los grados de afinidad. En este caso, destacan fundamentalmente dos:
-El primer grado, donde están el suegro y la suegra así como la nuera y el yerno.
-El segundo grado, donde se enmarcan el cuñado y la cuñada.
Aunque las legislaciones varían de acuerdo al país, es habitual que el parentesco de consanguinidad sea equiparado al parentesco que se establece a través de la adopción. Un hijo adoptivo, de este modo, cuenta con los mismos derechos que un hijo natural. Así la herencia se reparte de modo equitativo entre todos los hijos, por ejemplo, más allá de la existencia o no de consanguinidad.