Respuestas
La historia inicia con los recuerdos del Aviador, personaje desde cuyo punto de vista se narra la acción. Se trata de un personaje que desde niño ha sentido que no encaja con el mundo formal y pragmático que han creado los adultos. Sus puntos de vista son distintos: donde el veía un elefante dentro de una serpiente, los demás veían un sombrero.
IIYa de adulto, el Aviador prefiere dar largos vuelos en avión antes que la compañía de sus contemporáneos. Durante uno de estos vuelos, su avión sufre un desperfecto y se ve obligado a descender en el desierto del Sahara, en el cual se encuentra con el Principito.
El Principito es un niño que aparenta ocho años de edad, rubio y vestido con ropas propias de su rango. En cuanto traba amistad con el Aviador, le pide que le pinte un cordero. Dudando de sus cualidades como dibujante, el Aviador dibuja el elefante dentro de la serpiente de su niñez, el cual es reconocido por el Principito, quien insiste en que le haga el dibujo de un cordero. Tras algunos vanos intentos, el Aviador dibuja una caja con agujeros, indicándole al Principito que el cordero se encuentra dentro. El Principito aprueba el dibujo y se queda con él.
IIIDurante el tiempo que tarda el Aviador en reparar su avión, recibe las visitas del Principito, quien le revela que proviene de otro planeta, al que describe como muy pequeño
IVEl planeta del Principito es identificado por el Aviador como el asteroide B 612. Precisa que este dato está dirigido a las personas mayores, quienes entienden las cosas a partir de las cifras. Con la mención al número del asteroide, el Aviador considera que cumple con demostrar la verdad de su existencia.
VEl Principito le cuenta al Aviador que en su planeta crecen unos baobabs, árbol que en la Tierra alcanza proporciones descomunales, pero que en el planeta del Principito no son sino meros arbustos. El Principito revela así para qué necesita al cordero: para que se coma las hojas de los baobabs y estos no acaben con su planeta.
VIEl Aviador recuerda otros aspectos de la personalidad del Principito, entre ellos, su soledad, su melancolía y su gusto por ver puestas de sol, sobre todo cuando se siente triste.
VIIEl Principito manifiesta su preocupación respecto a lo que comen los corderos. Sobre todo, desea saber si además de arbustos, pueden comer flores. El Aviador responde con fastidio ante estas preguntas, dado que se encuentra ocupado en la tarea de reparar su avión. El Principito entonces le recrimina por ser como las personas mayores, por su carencia de interés en el destino de las flores y su relación con los corderos. La ira del Principito culmina en llanto.
VIIIEl Principito le revela al Aviador que a en su planeta existía una flor muy especial, muy hermosa pero a la vez vanidosa y orgullosa. La flor despierta el ingenuo amor del Principito, pero al mismo tiempo, lo confunde. El amor del Principito hacia la flor se llena de dudas.
IXEl Principito decide dejar su planeta, y decide aprovechar el vuelo de una bandada de pájaros para dejar su mundo. Antes de irse, limpia los volcanes, poda los baobabs y se despide de la flor, la cual le dice que lo ama y le pide disculpas por no haberse hecho entender, al tiempo que le recrimina al Principito haber sido tan tonto como ella. La flor apura al Principito para que parta sin que la vea llorar.
XEl Principito inicia un periplo por otros asteroides. El primero que visita está habitado por un rey, quien aparenta ostentar un gran poder pero que al mismo tiempo evidencia carecer de súbditos para ejercerlo. Le pide al Principito que se quede con él, pero el Principito decide continuar su viaje.
XIEl segundo planeta que visita el Principito estaba habitado por un vanidoso, cuyo único deseo es que lo aclamen y lo admiren. El Principito, antes de dejarlo, le pregunta para qué le sirve que lo admiren, sin obtener respuesta.
XIIEl siguiente planeta visitado por el Principito estaba habitado por un bebedor, un ebrio que bebe para olvidar que tiene vergüenza de beber, lo cual deja al Principito perplejo.
XIIIEl Principito visita luego un planeta habitado por un hombre de negocios, quien trafica con las estrellas: las cuenta, las registra, en fin, las posee. El Principito le increpa que eso no es de ninguna utilidad para las estrellas, dejando al hombre de negocios desconcertado.
XIVEl siguiente planeta estaba habitado por un farolero y su farol, el cual encendía y apagaba velozmente, puesto que su planeta giraba con mucha rapidez. El Principito lo deja con cierto pesar, pues le simpatiza este hombre que cumple su deber sin cuestionarlo, y al mismo tiempo, lamenta perderse las sucesivas puestas de sol que se producían en aquel mundo.