Respuestas
Respuesta:
Como actitud humana, Id cooperación es una forma noble y constructiva
de conducta: mueve al hombre a vivir en armonía con sus semajantes y es una
respuesta positiva de la personalidad al medio ambiente.
El sentido cooperativo se revela en múltiples manifestaciones de la vida:
orgánica, intelectual y social. En las especies elementales y en las desarrolladas
e inteligentes, el plan evolutivo establece la cooperación cOmo ley natural, para
el perfeccionamiento de las criaturas.
Algas, ¡nfusoríos, plantas superiores, el hombre, en toda la escala biológica los seres vivos aportan esfuerzo y energías -por instinto, afectividad o
rozonamiento- a fin de relacionarse, multiplicarse o supervivir.
Numerosos órdenes zoológicos y vegetales aparéanse y agrupan para
procrear, o buscando determinadas metaS y propósitos. El árbol que presta apoyo
a la débil planta trepadora y le brinda savia nutricio; el viento conductor de polen; el ave que transporta un grano y lo lleva hasta la tierra; el insecto que fabrica o destruye moradas y el que elaboro mieles; el macho, en fin, que por
ineptitud de fecundarse a sí mismo busca la participación de la hembra: todos
cumplen el mandato universal de cooperar.
la naturaleza duplicó ciertos órganos, previendo quizá una posible falla.
Pero hay otro motivo: la ayuda y asistencia mutua de las vísceras. Sin esa interacción, la estructura anatómica y el poder fisiológico serían menos fuertes, y por
ello, más vulnerables a la enfermedad y la muerte.
Así, reciprocando sus medios, colaborando, asistiéndose, la naturaleza
crea la vida y el hombre secunda su obra.
La criatura humana, pese a su organización superior, es limitada y dependiente. Marcha sola yo ciegas. Requiere cooperación de los seres y las cosas:
fraternidad, intimidad, calor entrañable; compañía de alguien que participe del
cansancio y el afán del camino. Y de la felicidad de haber llegado. Demanda el
concurso de otras fuerzas para vigorizar sus propias energías.
En su largo proceso de asentam¡ento terrestre, el hombre conoció el fracaso y la amargura de la lucha aislada. Volvió entonces tos oios a sus semejantes, en demanda de ayuda, y para ofrecer sus propios medios.
El gesto fue principio de colaboración y solidaridad humanas; triunfo de
un sentido social innato sobre el aislamiento individual cavernario. {El hombre
de hoyes producto de la cooperación de la naturaleza y del instinto asociativo
organizado}.
Somos animales sociables. Vivimos en sociedad. Contribuyen a nuestro
nacimiento factores biológicos sabiamente reunidos, y la sociedad imita ese proceso creacional uniendo inteligentemente a los hombres
Explicación: