Respuestas
1. Adopte una dieta más saludable y sostenible
La vida se mueve deprisa, y preparar comidas nutritivas puede ser complicado, pero las comidas saludables no tienen por qué ser elaboradas. En Internet abundan recetas saludables y rápidas que puede compartir con sus familiares y amigos.
2. Compre solo lo que necesita
Planifique sus comidas. Prepare una lista de la compra y aténgase a ella evitando las compras impulsivas. No solo desperdiciará menos alimentos ... también ahorrará dinero.
3. Elija frutas y hortalizas feas
No juzgue los alimentos por su apariencia. A menudo se tiran a la basura frutas y hortalizas magulladas o con formas extrañas porque incumplen unas normas cosméticas arbitrarias. No se preocupe ... el sabor es el mismo. Utilice la fruta madura para preparar batidos, zumos y postres.
4. Almacene los alimentos con sensatez
Pase los productos más antiguos a la parte delantera del armario o el frigorífico y coloque los nuevos en la parte trasera. Utilice contenedores herméticos para mantener frescos en el frigorífico los alimentos abiertos y asegúrese de cerrar los paquetes para que no entren insectos.
5. Comprenda el etiquetado de los alimentos
Hay mucha diferencia entre las fechas de “consumo preferente” y “caducidad”. A veces los alimentos siguen siendo inocuos para el consumo pasada la fecha de “consumo preferente”, mientras que la fecha de “caducidad” indica el momento en que el consumo deja de ser inocuo. Verifique las etiquetas de los alimentos para averiguar si contienen ingredientes no saludables como grasas trans y conservantes y evite los alimentos con azúcar o sal añadidos.