Respuestas
Respuesta:
1. Aumenta tu actividad física
Está comprobado que caminar 30 minutos diarios disminuye el riesgo de sufrir enfermedades. Para estar sanos no hace falta machacarse en el gimnasio. Con pequeños gestos podemos conseguir mantenernos en forma. Para ello, es conveniente utilizar las escaleras en vez del ascensor, y optar por ir andando o en bicicleta en vez de en coche siempre que sea posible.
Quien trabaje sentado debe levantarse cada dos horas para estirar las piernas y activar la circulación. En fines de semana, lo ideal es establecer rutinas relacionadas con la actividad física, como dar un paseo en bicicleta o salir a hacer senderismo.
2. Apuesta por una alimentación saludable
Cada vez hay más gente que opta por la comida healthy. Si queremos comer sano lo mejor es establecer un menú semanal saludable y comprar solo los ingredientes que vayamos a utilizar. Conviene incorporar las frutas y verduras en nuestra dieta, y realizar cinco comidas diarias, teniendo en cuenta que nunca podemos saltarnos el desayuno, ya que es una de las comidas más importantes de la jornada.
La dieta tiene que ser equilibrada y variada, preferiblemente de productos de temporada, y con las proporciones adecuadas. Además, debemos recordar beber agua para estar bien hidratados.
3. Consolida tus relaciones sociales
Somos seres sociales y relacionarnos es fundamental para nuestro bienestar emocional. Procura tener tiempo para estar con los que más quieres. Siéntate a hablar con tus padres tranquilamente. Queda con tus amigos para hacer una actividad que te guste. Visita a tus abuelos o conversa con tus compañeros de trabajo en un escenario distinto al ambiente laboral.
En ocasiones nos decimos que no tenemos tiempo para nuestras relaciones sociales, pero estas son verdaderamente, lo que más importa y son necesarias para sentirnos plenos.
Explicación:
Aumenta tu actividad física.
Apuesta por una alimentación saludable.
Consolida tus relaciones sociales.