Respuestas
Respuesta:
por la corrupción y el narco trafico
Explicación:
Respuesta:1. Más cultivos de coca
De acuerdo con cifras de un informe elaborado por la Oficina en Washington sobre América Latina (WOLA, por sus siglas en inglés), entidad dedicada a la promoción de los derechos humanos, el Plan Colombia asistió en la aspersión de más de 1,6 millones de hectáreas para intentar erradicar plantaciones de coca.
Por una parte, puede haber generado un riesgo para la salud de miles de personas, ya que en 2015 la Organización Mundial de la Salud clasificó al glifosato utilizado para ese fin como un producto probablemente cancerígeno (el mismo año el gobierno decidió dejar de realizar las fumigaciones aéreas con la sustancia).
De cualquier modo, dice WOLA, esa estrategia de erradicación ni siquiera funcionó.
2. Incremento de víctimas
En lo que parece una perfecta contradicción con los objetivos del proyecto, durante los primeros ocho años del Plan Colombia hubo un marcado incremento en el número de víctimas del conflicto interno colombiano.
Según la Unidad de Víctimas del país, más de 800.000 personas dijeron que fueron victimizadas en un sólo año, 2008.
Del total de 7,8 millones de personas registradas como esa unidad, alrededor de un 75% dijo que el hecho que denunció tuvo lugar durante los años del Plan Colombia.
Fundamentalmente se agudizó el problema del desplazamiento forzado.
No obstante, hubo situaciones de violencia que se redujeron.
"No creo que nadie pensara, hacia 2002, que en 2005 los homicidios bajaran casi a la mitad", dijo Adam Isacson, quien estuvo a cargo de la la elaboración del reporte de WOLA.
También se redujeron dramáticamente los secuestros y, en menor medida, el número de víctimas de masacres.
3. Violaciones de derechos humanos
Aunque es cierto que el Plan Colombia destinó recursos económicos que contribuyeron al trabajo de organizaciones de derechos humanos, también existe el argumento de que hubo un aumento del riesgo para defensores de DDHH por la militarización que la iniciativa trajo aparejada.
Sin embargo, para el sociólogo Ricardo Vargas Meza, quien ha estudiado la implementación del Plan Colombia, el impacto más fuerte fue sobre el común de la población civil.
"Hubo medidas muy duras contra la población civil, se incrementó el control de alimentos, por ejemplo", explicó. El objetivo, dijo, era prevenir que la guerrilla se aprovisionara a través de terceros.
El reporte de WOLA llama la atención sobre los casos de colaboración de las fuerzas de seguridad con grupos paramilitares, los casos llamados de falsos positivos (en los que civiles eran muertos por militares para hacerlos pasar por guerrilleros abatidos) y abusos por parte de servicios de inteligencia.
De todos modos, la situación de derechos humanos en general fue mejorando en los últimos años, respecto a los primeros de implementación del Plan Colombia.
4. Incremento de minería ilegal
Mientras la atención de las fuerzas de seguridad estaba puesta en otras partes, la minería ilegal se volvió una redituable fuente de financiación de grupos ilegales.
"Nunca estuvo en los cálculos del Plan Colombia", dijo Vargas Meza, porque las fuentes de financiación de la insurgencia que se habían identificado eran el narcotráfico, el secuestro y la extorsión.Aunque el problema sólo se volvió serio mucho después del inicio del Plan Colombia, cuando comenzó el incremento en los precios de los commodities, después de 2007, aclaró.
5. Amenaza de grupos posdesmovilización paramilitar
Durante los años 2003-2006, cuando ya estaba vigente el Plan Colombia, el gobierno acordó la desmovilización de los grupos paramilitares.
El resultado fue parcialmente exitoso, ya que un número importante de sus fuerzas (tal vez un 15%, sugiere el reporte de WOLA), se organizaron en las que el gobierno llama bandas criminales (bacrim), aunque otros prefieren denominar grupos posdemovilización paramilitar, que se dedican al narcotráfico, la extorsión y otras actividades criminales.
Tan grave es el poder de algunas de estas bandas, que el gobierno ha llegado a autorizar hasta el uso de bombardeos en ciertos casos. Hoy, con el avanzado proceso de paz con las FARC y un ELN con un reducido número de combatientes, muchos consideran a esos grupos criminales la principal amenaza de seguridad del país.
6. Militares vueltos mercenarios
Uno de los elementos clave del Plan Colombia ha sido el entrenamiento de las fuerzas de seguridad del país.
El país ha alcanzado un alto nivel de profesionalización en muchos de sus cuadros, incluso convirtiéndose en escuela para otras naciones; al curso de élite de la policía, llamado Jungla, por ejemplo, han concurrido efectivos del resto de América Latina y varios países del resto del mundo.
En principio eso puede considerarse un resultado esperado del Plan Colombia, ya que permite a los militares colombianos asesorar a pares de otros países en los que Estados Unidos también tiene interés de intervenir, asesorar o colaborar; incluso viajar a compartir su conocimiento.
Explicación: