Respuestas
Respuesta:
Para empezar, los reinos de la vida no son dos (animal o vegetal), sino cinco. Por un lado están los animales y las plantas, que todos sabemos lo que son. Vulgarmente, se suele considerar a los hongos como plantas. En realidad no lo son, pues carecen de la propiedad básica de los individuos del reino vegetal; la de obtener energía de la luz solar mediante el proceso de la fotosíntesis. Los hongos obtienen su energía de la descomposición de la materia orgánica del suelo, y conforman el tercero de los reinos de la vida. El cuarto reino es el de los protistas. Son seres compuestos por una única célula (unicelulares), que viven en el agua o en ambientes húmedos.
Explicación:
Pues por raro que parezca, a los virus son no se los considera 'seres vivos' propiamente dichos. Por un lado, es cierto, poseen código genético y se pueden multiplicar. Pero por otro, no son células, la forma más básica de vida independiente. Los virus son casi casi 'código genético puro'. Carecen por completo de la maquinaria necesaria para proveerse de energía o replicarse. La única manera de conseguir ambas cosas es introducirse en una célula (de animal, vegetal, hongo, protista o monera) y emplear todas sus estructuras en beneficio propio.
Todavía existen unos 'bichos más raros' que los virus. Se trata de los priones. Éstos ni siquiera tienen código genético. Son proteínas anormales con la propiedad de infectar células y multiplicarse a sí mismas. El prion más famoso es el que ocasiona la 'enfermedad de las vacas locas' y su variante humana, la enfermedad de Creutzfeld-Jacob. Otras enfermedades humanas producidas por priones son el insomnio familiar fatal, y el kuru. El kuru debe de ser la enfermedad con el mecanismo de transmisión más peculiar que haya existido: se transmitía entre los caníbales de la tribu Foré de Nueva Guinea, al… ingerir los cerebros crudos de sus enemigos.