• Asignatura: Historia
  • Autor: lisleygv75
  • hace 1 año

Aunque los aportes del pueblo afrocolombiano a la identidad nacional, incluyendo a San Andrés, Providencia y
Santa Catalina, han sido importantes, los términos de intercambio entre la nación mestiza y los afrodescendientes
han sido desiguales.
Puede afirmarse que las prácticas culturales de aquellos descendientes que llegaron al Reino de la Nueva
Granada en calidad de esclavizados, no han sido valoradas en su justa riqueza. Por ello no hacen parte del
imaginario de la nación y, cuando ocurre, su aporte cultural es estereotipado. En el mejor de los casos se vuelve
espectáculo para tolerarlo.
Sin embargo, los afrocolombianos hemos sobrevivido biológica y culturalmente. Hemos enseñado a la nación la
importancia de las redes familiares, de amigos, conocidos, para enfrentar la adversidad, para no pasar trabajos
para recorrer el mundo.
Le enseñamos a la nación que la rebeldía, la insurrección, el cimarronaje, la irreverencia, son principios básicos
para construir la ciudadanía. El antropólogo Jaime Arocha ha dicho que antes del conflicto armado interno los
afrodescendientes del Chocó Biogeográfico habían construido un nicho de convivencia con los indígenas, lo cual
muestra la capacidad dialógica de esta cultura.
Hemos protegido el medio ambiente, la rica biodiversidad de esa zona. Hemos enriquecido la gastronomía a tal
punto que hoy la presencia creciente de los afrocolombianos ha convertido sus restaurantes en los espacios de
los sabores negros para paladares blancos. Pero también hemos legado a la nación andina una corporalidad
distinta que se expresa en maneras de caminar, de mover el cuerpo, de hablar, despertando apetitos en las
almas solapadas.
Aportamos a la nación maneras distintas de tramitar los conflictos sociales. Por ello los lugares donde se viven
carnavales, son lugares de bajos niveles de violencia y resentimiento social, pues la burla, la mojiganga, la puesta
en escena de la miseria y la congoja permiten realizar curas al alma ante los vejámenes de la sociedad
hegemónica.
Lloramos a nuestros muertos a través de rituales como el lumbalú del Palenque de San Basilio. Separamos la
muerte del morir. Al español estándar le aportamos un lenguaje hablado regional, y al patrimonio lingüístico
nacional dos lenguas criollas, la de San Basilio de Palenque y la de San Andrés, Providencia y Santa Catalina.
Danzas y bailes también hemos producido con el aporte de otras culturas aquí presentes, como la cumbia, el son
de negros, el mapalé, el bullerenque, y músicas como el vallenato, la champeta criolla, los cantos de vaquería, e
instrumentos como el tambor.
Al lado de Caperucita Roja, de Blanca Nieves, los afrodescendientes han legado a la tradición oral colombiana la
araña Ananse, o miss Nancy, al tío conejo, al tío tigre, Juan el bobito, personajes que se encuentran tanto en el
África como en el caribe insular colombiano.
Todo esto hemos aportado. Por ello pedimos hacer parte de manera simétrica y respetuosa del baúl de la
nacionalidad. La inclusión nuestra a la nación pluriétnica y multicultural es una meta perentoria y alcanzable con
una verdadera voluntad política.

saca diez aportes del texto realizados por los afros a la nación

Respuestas

Respuesta dada por: FabrizioCarrasco
0

Respuesta:

NUESTROS APORTES NO HAN SIDO VALORADOS

Explicación:

la historia del cuento

Respuesta dada por: raquelcardenas18077
0

Respuesta:

ay no se

Explicación:

la verdad no se... disculpa

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