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Respuesta:
En las escrituras no hay ocasión para que alguien le pidiera a Jesús que sanara en sábado. Eso siempre llegó como una iniciativa del mismo Jesús con la implicación del señorío del sábado. El pobre hombre con la mano seca debe haber estado fascinado cuando Jesús los miró a todos, pero puso su atención en él., llamándolo para que avanzara, estirara su mano y se encontrara sano. En vez de regocijarse con él, los envidiosos escribas y fariseos estaban “ llenos de furia”. No tuvieron respuesta cuando les preguntaron si era legal hacer el bien o el mal en sábado, salvar la vida o destruirla. En cambio, comenzaron a complotar para darle muerte.
Jesús nos dice que “ha venido para que tengamos vida y vida en abundancia”. Permite que pidamos por este gran regalo para nosotros y todos nuestros seres queridos.