Preocupación filosófica del existencialismo y de la filosofía analítica
pd: poner la fuente de información (el link de donde se sacó la información)
Respuestas
Respuesta:
gracias por decir siempre braylin aquí está la mejores problemas y puede responder cualquier cosa por favor Coronita y 55 estrella por favor para mí. Para mí puntos
Respuesta:
1. La filosofía analítica nació hace un siglo como una filosofía revolucionaria y liberadora, pero con el paso del tiempo, a la vez que se expandía por el mundo entero, se fue convirtiendo en una filosofía domesticada y escolástica. La culpa de esta paradójica decadencia puede atribuirse a una serie de factores de todo tipo, aunque quizá el principal de ellos sea el desenfrenado proceso de profesionalización de la filosofía. Ya no podemos seguir callando acerca de los efectos perniciosos generados por la profesionalización. Los filósofos nos hemos convertido en empleados de instituciones de educación superior y, por ello, hemos quedado sujetos a las instrucciones —no pocas veces mezquinas y filisteas— de las autoridades de aquéllas. La profesionalización también es responsable de la especialización a ultranza. Muchos artículos de filosofía analítica son como una sofisticada herramienta de precisión que sólo sirve para ajustar un pequeño tornillo. Por eso no es sorprendente que los filósofos nos hayamos vuelto irrelevantes para el resto de la cultura. Esto ya lo preveía Husserl en su ensayo de 1911, La filosofía como ciencia estricta, donde afirmaba que una filosofía científica debía renunciar a dos antiguas aspiraciones: ofrecer una cosmovisión y dar una respuesta personal a las preguntas de la existencia.1 La mayoría de los filósofos analíticos aceptan estas consecuencias sin chistar; se ven a sí mismos como los matemáticos o los físicos y, por ello, piensan que es de esperar que los resultados de sus investigaciones no sean comprendidos por cualquiera. Ya los pitagóricos estaban convencidos de que sus estudios sobre los arcanos estaban fuera del alcance de los legos. Pero, a diferencia de los pitagóricos, los analíticos han renunciado a las grandes preguntas sobre la vida humana y sobre el cosmos. Esa tarea se la dejan a otros: a los sacerdotes, a los literatos e incluso a los científicos.
Explicación: