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5 hábitos básicos para una alimentación saludable
Es posible que con el inicio de este 2019, uno de tus propósitos de año nuevo haya sido bajar de peso, para lo cual, debes saber que esto se logra fácilmente si se realiza actividad física de manera frecuente, así como llevando una dieta balanceada de acuerdo a tus necesidades, para lo cual, es muy importante adoptar algunos hábitos básicos a la hora de ingerir nuestros alimentos.
Lo ideal sería que cualquier hábito para una buena salud pudiera adoptarse desde pequeños ya que es más fácil que nuestro cerebro aprenda cualquier rutina, sin embargo, nunca es tarde para cambiar. Además hay que recordar que a medida que vamos envejeciendo nuestro tasa metabólica disminuye (por ejemplo dejamos de crecer y desarrollarnos) por lo que debemos cuidarnos más y comenzar a modificar nuestros hábitos nos ayudará a obtener una buena calidad de vida.
Estos son algunos hábitos básicos y sencillos de adoptar:
1. Desayunar: se dice que el desayuno es el alimento más importante del día ya que de esto depende que se cuente con la energía necesaria para comenzar nuestras actividades diarias, lo ideal es desayunar no más de 45 minutos después a haberse levantado y por su puesto antes de iniciar labores en el trabajo, la escuela, entre otros.
2. Comer despacio y masticar bien los alimentos: algunas personas están acostumbradas a ingerir sus alimentos de manera muy rápida y sin disfrutarlos, tal vez porque tienen prisa cuando están comiendo o simplemente porque así lo hacen, es importante hacerlo con calma ya que además de que saboreamos más cada alimento que comemos, tendremos una mejor digestión y nos ayuda a saciarnos más rápido con menor cantidad de comida.
3. Consume al menos 4 raciones de frutas y verduras al día: estos alimentos aportan micronutrientes muy importantes para nuestro cuerpo, como fibra, vitaminas y minerales, los cuales son necesarios para llevar a cabo todas las funciones de nuestro cuerpo para conservar nuestra salud. Incorpóralas enteras y de preferencia crudas o escalfadas a tus colaciones, guisos, guarniciones, etc.
4. Beber agua natural: un alto porcentaje de nuestro cuerpo está compuesto por agua; esta es vital para mantener y llevar a cabo funciones vitales como respirar, eliminar desechos, realizar la digestión de los alimentos, entre otros.